Mr. Iguana dejó a todos boquiabiertos al incursionar en un deporte totalmente distinto a la Lucha Libre. Conocido por sus habilidades en el ring, esta vez sorprendió a sus seguidores al participar en un evento de béisbol, demostrando que su talento y carisma no se limitan a un solo escenario.
El luchador mexicano tuvo el honor de lanzar la primera bola en un emocionante partido de la Liga Mexicana del Pacífico, representando a los Tomateros de Culiacán durante la serie frente a las Águilas de Mexicali. Su presencia en el diamante captó la atención de los fanáticos, quienes lo recibieron con entusiasmo y aplausos, reconociendo su versatilidad como figura pública.
Antes del lanzamiento, Mr. Iguana inició la ceremonia desde la lomita con toda la energía que lo caracteriza, acompañado de su inseparable compañero, la icónica Iguana. Este momento no solo resaltó su conexión con el público, sino que también mostró su lado más cercano y divertido fuera del cuadrilátero.
Así fue el lanzamiento de Mr. Iguana con Tomateros de Culiacán
El carismático luchador originario de Culiacán, conocido en el mundo de la lucha libre como Mr. Iguana y figura destacada de la WWE y AAA, tuvo el honor de lanzar la primera bola en el estadio de los Club Tomateros. Este momento marcó un antes y un después para sus seguidores, quienes lo vieron brillar fuera del cuadrilátero, demostrando que su presencia y carisma trascienden cualquier deporte.
Mr. Iguana compartió sus recuerdos más nostálgicos, recordando cómo de niño solía asistir al extinto estadio Ángel Flores, soñando con escuchar la voz del icónico “Caifán” anunciándolo mientras salía del dogout. Ayer, al cumplir este sueño, sumó un logro más a este año lleno de momentos especiales, celebrando con emoción y gratitud cada paso que da en su carrera y en su vida personal.
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¿Cuál es la relación de Mr. Iguana con los Tomateros de Culiacán?
Mr. Iguana, cuyo nombre real es Santiago Ibarra Calderón, nació en la ciudad de Culiacán, Sinaloa, cuna de grandes talentos deportivos y culturales. Desde pequeño, Santiago mostró una gran pasión por el béisbol y se convirtió en un ferviente seguidor de los Tomateros de Culiacán, equipo que siempre admiró y que dejó una huella importante en su infancia y en su amor por el deporte.
