Ryan García se encuentra en una etapa crucial de su carrera. Luego de enfrentarse a rivales de alto nivel como Oscar Duarte y Devin Haney, el californiano busca consolidarse como una de las figuras más importantes del boxeo. Su próximo desafío será contra Rolando "Rolly" Romero, una pelea que podría definir su rumbo en la división.
Para este reto, “King Ry” volverá a contar con la preparación de Derrick James, uno de los entrenadores más influyentes del boxeo actual. James ha trabajado con campeones como Jermell y Jermall Charlo, Anthony Joshua y Errol Spence, consolidándose como un referente en el mundo del pugilismo. Su enfoque disciplinado y técnico ha sido clave en la evolución de García, ayudándolo a mejorar su estilo de pelea y fortalecer su estrategia en el ring.
El reto ahora es mayor: Derrick deberá afinar cada detalle en el campamento de Ryan para que llegue en óptimas condiciones a su pelea contra Rolly Romero; después de que el mexicoamericano no logró trabajar con Eddy Reynoso. Con su disciplina y enfoque meticuloso, buscará potenciar las habilidades del californiano para consolidarlo como un contendiente de élite en su división.
Un entrenador con un legado consolidado
Derrick James no solo ha brillado como el estratega detrás de grandes campeones, sino que su trabajo ha sido reconocido en múltiples ocasiones. En 2022, la AMB lo distinguió como el mejor entrenador del año, mientras que en 2023 la Asociación de Escritores de Boxeo de América le otorgó el mismo reconocimiento.
A pesar de su éxito, ha expresado que no planea expandir su establo de peleadores. Su objetivo es enfocarse en los pugilistas que ya entrena y retirarse junto con ellos, asegurando que cada uno alcance su máximo potencial antes de cerrar su carrera como entrenador.
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Rolly Romero buscó la pelea con Ryan García
Aunque la rivalidad entre Ryan García y Rolly Romero lleva años, el enfrentamiento entre ambos no estaba inicialmente en los planes. De hecho, la intención original era que García se midiera contra Isaac "Pitbull" Cruz. Sin embargo, Romero vio en esta pelea su oportunidad de oro y tomó la iniciativa para que se hiciera realidad.
"Le hablé por teléfono y aceptó".
"Solo hice una llamada. No fue realmente un tema de convencer a nadie", confesó Romero al explicar cómo logró que el mexicoamericano aceptara el combate. Su insistencia dejó fuera de la ecuación a Cruz y aseguró su lugar en el evento ”Fatal Fury" del 2 de mayo en Times Square, Nueva York.
