Tras más de noventa minutos igualados, los Gunners se clasificaron a los cuartos de final de la Carabao Cup desde los once pasos en una agónica muerte súbita.
Liverpool y Arsenal se volvían a ver las caras apenas a unos días de haber jugado en la Premier League, de nueva cuenta Anfield era el escenario para ver a estos dos gigantes del futbol británico, pero ahora por los octavos de final de la Carabao Cup.
El encuentro lucía muy parejo en los primeros minutos, aunque los Gunners lograban incomodar en el campo a los pupilos de Jürgen Klopp, incluso causando a amonestación de Takumi Minamino apenas a los 15 minutos.
Poco a poco los locales se hacían del balón y de las oportunidades, pero ninguna lograba perforar la meta del arquero alemán Bernd Leno, que mantenía de momento su arco en cero durante los primero 45 minutos.
En la segunda mitad la tónica del partido no fue muy diferente, y aunque los Reds mantenía el dominio del encuentro, no lograban capitalizar las jugadas y el ceros permanecía en el electrónico.
Aunque el Arsenal intento acelerar en los minutos finales con la entrada de Alexandre Lacazette en el ataque, la igualdad en el marcador seguía siendo la constante del partido, mientras soportaban en el fondo el asedio del Liverpool.
Luego de 97 minutos de igualdad el pase a los cuartos de final se jugaría desde los once pasos.
El primero en cobrar por los Reds sería James Milner, quien hacía efectivo su disparo sobre Leno y le daba la ventaja a los locales; el primero por los Gunners vendría a cuenta de Lacazatte para poner el 1-1.
Wijnaldum y Soares capitalizaban el segundo cobro para sus respectivos equis; El Nenny fallaría para los Gunners y Minamino le daba la ventaja por 3-2 en la tanda.
Origi le metía presión a los suyos ante la atajada de Leno, Maitland-Niles igualaba 3-3 los penales; Jones y Pépé lo igualaban a cuatro, habría muerte súbita en Anfield.
En el matar o morir Wilson fallaría su disparo y ante el acierto de Willock, los Gunners se clasificaban a los cuartos de final de la Carabao Cup.
JV