Tomás Boy es sin duda uno de los mejores jugadores que ha dado México. Su calidad lo llevó a representar a la Selección Mexicana en el Mundial de 1986 y a ganar varios títulos con los Tigres. Incluso estuvo a punto de emigrar a Europa, sin embargo no quiso cambiar de equipo pese a que este equipo mostró mucho interés.
El fallecido técnico contó alguna vez cómo se dio el acercamiento con ese equipo, cómo fue que jugó contra él y con qué tipo de jugador iba a compartir vestidor, un crack mundial de la época.
¿A qué equipo de Europa pudo emigrar Tomás Boy y por qué no quiso?
El Jefe contó en alguna ocasión qué equipo del Viejo Continente quiso llevarlo a jugar con ellos, después de verlo en una gira que hicieron los Tigres con tierras europeas. Boy iba a jugar con una de las máximas figuras del futbol mundial en ese momento, pero al final prefirió quedarse en México.
En 1979, con el equipo Tigres hicimos una gira europea como premio al campeonato obtenido el torneo de liga anterior. Jugamos un torneo en Italia y el equipo donde jugaba Paolo Rossi, que era el Perugia, hizo un intento fuerte por hacerse de mis servicios y la verdad hay dos cosas que sucedieron”, contó Boy en una entrevista con Futbolsapiens.
Al final entre su desición y las trabas de los Tigres, El Jefe se quedó en México, en primer lugar porque le pagaban más dinero y porque prefirió poner atención a su matrimonio.
No me pagaban lo que yo creí que me deberían haber pagado y me hizo comodino, me pagaban mucho más en los Tigres y… ¡estaba yo ya casado! Y bueno, pues la Universidad de Nuevo León, que entonces administraba al equipo de futbol, decidió que yo era un jugador franquicia; entonces obstaculizó muchísimo mi transferencia”.
En esa misma charla, Tomás Boy dejó ver cierto arrepentimiento por no salir a probar suerte a Europa. De hecho el tema ha sido punto débil en discusiones con otros colegas, principalmente con Hugo Sánchez, a quien tachó de tibio en Selección Mexicana, aunque brillante con el Real Madrid.
Eso era cuando tenía yo 25 años. Después a los 30, pues ya estaba grande. Pero la verdad es que fui muy comodino, esa es la verdad de las cosas. Sin embargo, oportunidades las tuve”, finalizó.