Aficionados invaden el campo en plena final de la Champions League | VIDEO

Se vuelve a repetir la historia. La tan ansiada final de la Champions League entre Real Madrid y Borussia Dortmund ha mostrado imágenes que cada vez se repiten con más frecuencia en los distintos estadios del fútbol europeo. En este caso fue Wembley el escenario encargado de albergar uno de los partidos más esperados de la temporada. Sin embargo, lo que debería ser un ambiente repleto de fiesta y alegría, no lo es del todo. Resulta ser que varios aficionados invaden el campo de juego a escasos minutos de haber sonado el pitazo inicial.  

El partido había iniciado con el Borussia Dortmund teniendo la primera posesión. El balón había pasado por algunos jugadores, hasta llegar a los pies de Gregor Kobel. Sin embargo, una vez que el portero despejó hacia el medio, el juez esloveno Slavko Vincic tuvo que detener el juego debido a la invasión de cinco aficionados. Algunos de ellos empezaron a correr por el terreno de juego, mientras que otros se acercaron para tomarse fotos con Bellingham y otros jugadores destacados. Afortunadamente, la situación se resolvió sin mayores problemas y el juego pudo continuar.

Si bien éstas son situaciones que cada vez se repiten con mayor frecuencia en el fútbol internacional, lo extraño de esta situación fue el extenso tiempo que permaneció el primer interruptor del juego, quien tuvo la posibilidad de acercarse a Jude Bellingham y tomarse una foto. No obstante, eso no fue lo único, sino que también logró llegar hasta la posición de Vinicius. Recién después de un largo rato, la seguridad del estadio se dio cuenta de lo acontecido y actuó en consecuencia. 

¿Falló el operativo de seguridad?

La Policía Metropolitana de Londres ha desplegado un dispositivo de seguridad que cuenta con más de 2,000 agentes, apoyados por 400 agentes adicionales, para evitar incidentes como los de la Eurocopa 2021. La comandante Louise Puddefoot afirmó que quieren asegurar una experiencia segura y disfrutable para los aficionados. 

El gran número de hinchas sin entrada plantea un riesgo de intento de ingreso ilegal al estadio. Cada club recibió 25,000 boletos y los 40,000 restantes fueron distribuidos por la UEFA. Para evitar problemas, la Federación Inglesa de Fútbol ha invertido más de 5 millones de libras esterlinas en seguridad, desplegando 2,500 guardias en Wembley. Se recomienda usar el subterráneo, línea Bakerloo, bajando en la estación Wembley Stadium, donde ya se puede ver el estadio, hoy pintado de amarillo.