En un emocionante duelo correspondiente a la Jornada 7 de la UEFA Champions League, el PSG, dirigido por Luis Enrique, consiguió una agónica remontada frente al Manchester City de Pep Guardiola en el Parc des Princes. Los goles de Ousmane Dembélé, Bradley Barcola, João Neves y Gonçalo Ramos le permitieron a los parisinos recuperar el rumbo y mantener vivas sus esperanzas en la competencia europea.
El primer tiempo estuvo marcado por un momento de controversia. En el minuto 45, Achraf Hakimi parecía abrir el marcador con un remate certero tras una gran asistencia de Barcola, culminando una jugada colectiva brillante. Sin embargo, el gol fue anulado por un fuera de juego en la acción previa, dejando el marcador en cero al descanso.
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Así terminó un primer tiempo con más dudas que emociones, marcado por un juego monótono aunque con intentos de peligro por parte de ambos equipos. Durante los 15 minutos del descanso, los entrenadores aprovecharon para ajustar estrategias y planificar cambios que demostraron ser clave en el desarrollo del partido.
Un segundo tiempo arrollador
la segunda mitad arrancó con un City decidido a imponer condiciones. En el minuto 49, Jack Grealish aprovechó un rebote en el área chica para marcar el 1-0, su primer gol en cinco encuentros de Champions esta temporada. Apenas unos minutos después, Erling Haaland demostró su instinto goleador en el minuto 52, poniendo el 2-0 y silenciando momentáneamente a los aficionados parisinos.
Pero los rojos y azules no estaban dispuestos a rendirse. En el minuto 55, Ousmane Dembélé devolvió la esperanza a los locales con un gol que calmó las aguas. Y apenas cinco minutos más tarde, Barcola, con sangre fría, aprovechó un rebote tras un disparo al travesaño y envió el balón al palo izquierdo para igualar el marcador 2-2.
La remontada parisina se completó en el minuto 78. Un tiro libre perfectamente ejecutado terminó en un preciso centro que João Neves, el joven portugués de 20 años, transformó en gol. Su remate fue decisivo para sellar el 3-2, desatando la euforia en el Parque de los Príncipes.
El broche de oro llegó sobre el final. Gonçalo Ramos, con un remate certero, marcó el 4-2 definitivo, desatando una explosión de alegría en el recinto. Los aficionados se levantaron de sus asientos para celebrar con euforia, mientras el delantero portugués sellaba una victoria que dejó claro que el PSG no solo lucha, sino que también sabe cómo ganar con autoridad.
Esta victoria no solo da oxígeno al conjunto francés en la tabla, sino que también consolida la fortaleza del equipo bajo presión, dejando claro que la Champions League sigue siendo su gran objetivo.