Oscar dos Santos Emboaba Júnior, conocido simplemente como “Oscar”, tomó una decisión que cambió su carrera y su vida. Tras más de 200 partidos con el Chelsea y a sus 25 años, el mediocampista decidió dejar la Premier League para unirse al Shanghai SIPG en enero de 2017. La decisión, criticada por muchos, estuvo motivada principalmente por asegurar el futuro económico de su familia y aprovechar una oferta imposible de ignorar.
El brasileño no solo se convirtió en el jugador mejor pagado del mundo en ese momento, con un salario semanal de 450 mil euros, sino que también vivió una experiencia personal que lo llevó a valorar otros aspectos del fútbol. Disfrutó de tranquilidad, cercanía con sus hijos y una vida familiar estable, elementos que no siempre fueron posibles durante su etapa en Europa.
Después de ocho temporadas en Asia, y nueve años de carrera profesional que lo consolidaron como uno de los futbolistas mejor remunerados de la historia, este decidió regresar a su país natal en enero de 2025 para jugar en São Paulo, el club de sus amores, cerrando un ciclo que lo transformó tanto dentro como fuera del campo.
La oferta que cambió todo
"Cuando llegó la primera oferta de China, la rechacé sin pensarlo. Amaba al Chelsea, a la afición, y todavía soñaba con ganar la Champions y seguir con la selección de Brasil. Pero la vida en el fútbol cambia rápido: dejé de jugar con frecuencia, cambiaron entrenadores y la competencia en la selección era durísima. En ese momento volvieron y me hicieron una propuesta imposible de ignorar, no solo por el dinero, sino por la oportunidad de darle estabilidad a mi familia. Con mi esposa pensamos: '¿y si mañana me lesiono y todo se acaba?'. Venimos de un origen humilde en Brasil, y esta era una chance para cambiar el destino de todos los nuestros'".
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"Al principio me arrepentí. Extrañaba la Champions, la selección, ese ambiente único del fútbol europeo. Pero poco a poco descubrí algo distinto: en China tuve tranquilidad, pude estar más con mis hijos y disfrutar de mi familia. Shanghai resultó ser una ciudad increíble y la gente del club me trató de maravilla. Pero lo cierto es que en esos ocho años en China fui feliz. Y al final, eso también es ganar".
Durante su estancia, acumuló alrededor de 180 millones de euros en salarios, primas y bonificaciones, una cifra comparable con estrellas como Lionel Messi, Cristiano Ronaldo o Neymar Jr. A pesar de la explosión de la burbuja económica en la Superliga china y la salida de muchos jugadores, el futbolista permaneció, asegurando ingresos millonarios y consolidando su posición como uno de los mejores pagos de la historia.
Un legado en la Superliga China
Oscar fue el último vestigio de la época dorada de la Superliga, que atrajo a numerosas estrellas internacionales con sueldos desorbitados. En su mejor momento, sus ingresos anuales rondaban los 24 millones de euros libres de impuestos, equiparándose a figuras como Kevin De Bruyne o Erling Haaland en el Manchester City. Su permanencia en Shanghai, durante casi una década, le permitió disfrutar de estabilidad económica y personal, algo que valoró más que la notoriedad mediática.
El regreso a Brasil
Finalmente, tras finalizar su contrato en 2024, el jugador decidió volver al fútbol brasileño y continuar su carrera en São Paulo desde enero de 2025, club donde es hincha. Aunque recibió otras ofertas, su decisión estuvo guiada por el deseo de cerrar un ciclo en el país que lo vio nacer y de acercarse a su familia.
