A lo largo de la historia del fútbol, la relación entre México y Argentina siempre estuvo marcada por la rivalidad dentro de la cancha. Partidos intensos en Mundiales, choques de estilos y una constante comparación entre ambas ligas han alimentado ese contrapunto deportivo. Sin embargo, lo curioso es que mientras en el país tricolor es habitual ver a una gran cantidad de futbolistas argentinos brillando en distintos equipos, el camino inverso (aztecas en el fútbol sudamericano) ha sido mucho más escaso y aislado.
De hecho, apenas alrededor de 17 futbolistas nacidos en México han tenido paso por clubes de la Liga Argentina, un número realmente bajo si se compara con la masiva "exportación" de jugadores albicelestes hacia la Liga MX. Muchos de estos intentos fueron fugaces, con pocos minutos en cancha, e incluso algunos pasaron inadvertidos en las planillas oficiales. Aun así, cada caso aporta una historia particular dentro de este inusual intercambio futbolístico.
Hoy en día, por primera vez en la historia, hay cuatro futbolistas mexicanos activos en la Liga Profesional Argentina, todos en diferentes categorías y etapas de formación. Esto no solo es un hecho inédito, también puede ser el inicio de una nueva etapa: que más futbolistas mexicanos se animen a llegar a la “LPF”, un torneo que casi nunca abrió las puertas a jugadores de ese país y donde sus apariciones fueron siempre muy contadas.
Los mexicanos que han jugado en la Liga Argentina
El primer antecedente remite a Luis García Cortina, quien en 1940 pasó por Vélez Sarsfield, lo mismo que Luis “Pirata” Fuente, histórico atacante que también vistió la camiseta del club de Liniers ese mismo año. Décadas después, uno de los nombres más reconocidos fue Alberto García Aspe, volante de gran trayectoria en México y la Selección, que tuvo un breve paso por River Plate en 1995, aunque con escaso impacto.
Otro que generó expectativa fue Luis Hernández, “El Matador”, quien llegó a Boca Juniors en 1997 y apenas disputó un par de encuentros internacionales, sin lograr continuidad. Más tarde, en 2007, el lateral Mario Méndez recaló en Vélez Sarsfield, aunque también con poca participación.
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En 2016, Jonny Magallón jugó en Lanús, cedido a préstamo por seis meses, sin lograr consolidarse. Otros nombres menos conocidos pero con presencia en equipos argentinos fueron Carlos López (Talleres de Córdoba, sin minutos oficiales), Moctezuma Serrato (Defensa y Justicia, 2006), Bardo Fierro (Talleres, pocos partidos), Eder Borelli (Nueva Chicago, debut en 2008), y Eduardo Rergis (Instituto de Córdoba, en la B Nacional en 2010).
El caso más resonante de los últimos años es el de Luca Martínez Dupuy, delantero surgido en Rosario Central y que actualmente juega en Godoy Cruz, siendo el único con continuidad plena en la Primera División. Además, aparecen jóvenes promesas como Santiago Erviti (Aldosivi, divisiones juveniles), Francisco Pumpido (Unión de Santa Fe, juveniles) y Thiago Gigena (Newell’s Old Boys, Sub-20), quienes representan la nueva camada de mexicanos en Argentina.
¿Hubo mexicanos campeones en Argentina de la Primera División?
A pesar de la cantidad de nombres mencionados, la realidad es que ninguno de los futbolistas aztecas que jugaron en la LPF logró consagrarse campeón en Primera División. La mayoría apenas sumó partidos esporádicos o directamente no llegó a debutar oficialmente en liga, mientras que otros solo participaron en competiciones internacionales o categorías juveniles.
El caso más cercano a un protagonismo real es el de Luca Martínez Dupuy, que actualmente busca trascender en Godoy Cruz dentro del torneo local, aunque todavía no ha levantado un título en suelo argentino.
