El austriaco Toto Wolff, jefe máximo de la escudería Mercedes, está en el ojo del huracán y es que de acuerdo con reportes de diversos medios, habría abusado información confidencial y ya es investigado por autoridades financieras.
Junto con Wolff, también aparece el nombre de Lawrence Stroll de Aston Martin, un amigo muy allegado del austriaco. Es la Autoridad Federal de Supervisión Financiera de Alemania la que investiga desde 2020 la compra de acciones de Aston Martin por parte de Toto.
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Resulta que en abril del año pasado, Wolff adquirió 0.95% de las acciones de Aston Martin por una cifra que se especula es cercana a los 30 millones de euros y seis meses después la escudería Mercedes anunció que quería adquirir una participación de hasta un 20% más en Aston Martin.
Luego, en mayo el equipo británico nombró como consejero delegado a Tobias Moers, que antes estuvo involucrado en una filial de Mercedes.
Estos hechos coincidieron con una elevación exponencial de Aston Martin: sus acciones subieron un 60% desde abril del 2020.
¿Qué pasará con Toto Wolff?
El caso también sigue la Financial Conduct Authority de Gran Bretaña y Wolff necesita explicar tanto a las autoridades Alemanas, como a las británicas, si tenía conocimiento de la inversión de Mercedes cuando adquirió sus acciones, ya que habría obtenido un gran beneficio económico.
Hay que recordar que previo a la pausa de verano, Mercedes se colocó en la primera posición de Constructores en la Fórmula 1 con 303 puntos luego del polémico triunfo de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Hungría.
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