Checo Pérez ya cuenta las horas para saltar al Circuito de Albert Park para disputar el GP de Australia de F1, donde lamentablemente el piloto mexicano de Red Bull tuvo unas prácticas 1 y 2 complicadas, pero con el ánimo para darle pelea a los Ferrari este domingo en Melbourne, luego del cual podría volver a su millonaria mansión de descanso que tiene en Puerto Vallarta, todo un paraíso terrenal.
Refugio perfecto para alejarse de todas las presiones que vive actualmente en Red Bull, la millonaria mansión de Checo Pérez en Puerto Vallarta se encuentra a solo unas cuadras del malecón, con una vista impresionante del mar y un ambiente de paz y serenidad, pero cuya tranquilidad, diseño y funcionalidad se ajustan a sus necesidades como piloto mexicano de F1.
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De Alemania y España, a su oasis personal en Puerto Vallarta
Luego de irse a Alemania en su niñez para iniciar su carrera como piloto mexicano y una vida adulta entre España y México, ya en F1, tras el nacimiento de su primer hijo finalmente Checo Pérez decidió encontrar su paraíso personal en las majestuosas playas de Puerto Vallarta, donde el volante de Red Bull tiene una millonaria mansión de disfrute familiar valuada en alrededor de 3 millones de dólares y cuyo interior destaca por su diseño minimalista, con tonos neutros como el azul, gris y blanco que crean un ambiente de calma y armonía.
Se trata de un oasis que no solo ofrece vistas impresionantes del mar desde su balcón y ventanas tipo loft, sino que también es su “búnker privado”, que ofrece privacidad sin sacrificar la conexión con el exterior y una conexión profunda con la naturaleza, en el que los espacios están pensados para la convivencia, con un comedor para 12 personas y un amplísimo salón.
Checo Pérez cuenta con todo para su preparación en Vallarta
Ah, pero eso no es todo, pues su exigencia como piloto mexicano de F1 también está cubierta, por lo que Checo Pérez cuenta también con un gimnasio personal de tecnología de punta que le permite mantenerse en forma durante el receso de la temporada, pero que no contrasta con el resto de la casa al mantener la cohesión estilística y funcional del hogar.
Y es que su millonaria mansión no solo es un lugar para recargar energías entre competencias, sino también un espacio para gozar de la vida al lado de su familia, algo esencial en la vida del piloto mexicano de Red Bull, subcampeón del mundo el año pasado y sublíder en este 2024 solo detrás de su coequipero, el tricampeón mundial neerlandés Max Verstappen.