La muerte ronda los estadios del mundo, las canchas, diamantes, emparrillados y encordados. Por curioso que parezca, sale en estas fechas para mantener viva una tradición mexicana donde en esta ocasión los protagonistas son las estrellas del deporte.
Julio Urías, reciente campeón de la Serie Mundial con los Dodgers, reta a la huesuda desde la loma; Tom Brady lo hace con su puntería en los controles de los Tampa Bay Buccaners y Neymar se tira y se revuelca para que la muerte no se lo lleve.
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Además de ellos, otros exponentes del deporte toman su lugar frente a las calaveritas que asaltan las disciplinas en este Día de Muertos.
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Aquí algunas de las calaveritas.
Julio Urías
En la lomita estaba Julio Urías acomodándose los lentes,
cuando la muerte tomó su turno al bate en el diamante.
“Si te conecto imparable vas conmigo al camposanto”,
pero a Urías no le inquietó y lanzó serpentina caliente.
El toletazo seco mandó la bola por todo jardín central,
hasta perderse de vista en el más allá.
“Ahora sí te vas conmigo a lanzar la bola en el panteón,
aunque hayas estado en Serie Mundial, Valenzuela es el mejor”.
Urías se calentó y el cráneo le arrebató,
y en la loma tomó vuelo y de derecha lo lanzó.
“Si quieres me voy contigo, no le tengo miedo a la muerte,
pero seré el mejor pelotero mexicano, ten eso presente”.
Mike Tyson
Como león enjaulado estaba el mítico Mike Tyson,
queriendo salir del retiro porque del descanso estaba harto,
no encontraba rival para su pleito en noviembre,
hasta que alguien levantó la mano y lo retó con mucho temple.
Cuando llegó la pelea, Tyson sintió un frío como nunca,
y es que la muerte estaba con los guantes soplándole la nuca.
“Te llevaré al otro mundo porque te gusta morder orejas,
piensa que es mejor esto que estar tras las rejas”.
Iron Mike no se dejó y un cruzado le lanzó,
y aunque salió ganador la muerte lo detuvo.
Ven conmigo por las buenas o las malas,
o le pediré ayuda a ‘Buster’ Douglas.
Tyson cedió y la muerte se lo llevó,
pero siempre presumió que a la muerte la noqueó.
Neymar
El habilidoso brasileño fingió un insulto racista,
la Liga francesa lo castigó por mentiroso y arribista.
La muerte se enteró en el Heraldo Deportes,
vino a la tierra para raptarlo por ese tremendo osote.
Ney quiso llevarse entre las patas a la ex novia de Maluma
pero Natalia Barulich se resistió y se fue solo hasta su tumba.
“Aquí yace Neymar, que en la tierra fue goleador,
eso le pasa por tramposo y por bajarle la novia a su valedor”.
Floyd Mayweather
La muerte se vistió de limosnera por Las Vegas,
para ver si alguien de ella se apiadaba.
Pasó Mayweather en uno de sus autos de lujo,
y ni un quinto quiso dejarle a la pobre flaca.
En consecuencia la muerte, llena de rabia, le dijo que al panteón se lo llevaba por codo.
Al Money no le quedó de otra más que irse de todos modos,
pero sólo pidió por favor que su tumba fuera de oro.
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Conor McGregor
Por andar de 'gallo' retando a grandes boxeadores,
Conor McGregor atrajo la atención de la muerte y sus valedores.
La flaca le dijo que le bajara de pantalones,
o se lo iba a llevar a dar un rol por los panteones.
The Notorius, genio y figura, siguió alardeando y retando,
por eso en un sparring, un mal golpe lo mandó al camposanto,
"Te dije que le bajaras", dijo la muerte desmedida,
"Mejor te quito tus millones, para que vivas la muerte en vida".
Tom Brady
Dejó a los Patriotas, pero no los sacó de su corazón,
se puso la de los Bucaneros, pero no se convenció.
La calavera del escudo un día se le apareció,
para darle un mensajito y volviera a ser el mejor.
Tom Brady escuchó con atención a su nueva amiga,
Ya en el partido se sintió raro todo el día.
Cuando llegaron a derribarlo, el rival se fue en banda,
“Brady ya estás muerto, eres invisible, a ver si así ganas”.
La huesuda le robó la vida al veterano ídolo de las masas,
el quarterback se molestó y pensó en la venganza.
Desde la yarda 40 lanzó el ovoide hasta el palco de la calaca,
que se estiró completita para burlarse de él con esa atrapada.
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Chucky Lozano, Chicharito y Raúl Jiménez
FDR