El encuentro entre León y Santos terminó picante. Tras la remontada de La Fiera (2-1) y el riesgo de quedarse fuera de la liguilla, los jugadores del equipo lagunero buscaron revancha frente a sus rivales, después del silbatazo final del árbitro Óscar Mejía, y llegaron a los empujones en el túnel de salida del Estadio León.
Las cámaras de televisión grabaron el momento en el que ambos equipos vaciaron sus bancas y corrieron rumbo al vestidor, para seguir con los reclamos verbales y agresiones físicas. Hasta ese lugar llegaron los técnicos Ignacio Ambriz y Guillermo Almada, quienes, con ayuda del cuerpo arbitral, lograron contener el enfrentamiento.
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La pelea inició por un señalamiento del colombiano Andrés Mosquera desde la banca de los Panzas Verdes, que encendió el ánimo de los elementos de Santos. Una vez terminado el encuentro, Mosquera quedó en medio de los reclamos y tuvo que ser custodiado por sus compañeros rumbo al túnel de salida.
Aunque el silbante Óscar Mejía no reportó ninguna amonestación o expulsión hacia los involucrados, el conato de bronca quedó registrado en la transmisión y evidenció la calentura de los Guerreros, que pelean por un lugar en la liguilla.
AAH