La carrera de Julio Urías en Grandes Ligas está en vilo, luego de que el pitcher de los Dodgers fuera puesto bajo licencia administrativa por la Major League Baseball (MLB) por las acusaciones en su contra por supuesta violencia doméstica grave, tras ser arrestado la noche del pasado domingo luego de supuestamente agredir físicamente a su pareja Daysi Pérez.
Se trata de la segunda acusación por violencia doméstica contra Julio Urías, aunque en esta ocasión de manera agravada, por lo que la MLB decidió otorgarle una licencia administrativa mientras continúan las investigaciones abiertas de lo ocurrido luego de que el lanzador fue a ver un partido de Lionel Messi con el Inter de Miami ante el LAFC.
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Julio Urías, momentáneamente sí pero no con los Dodgers
La licencia administrativa funciona como una especie de “limbo” en el que Julio Urías sí se mantiene con el conjunto de los Dodgers, pero no como jugador activo debido a una ausencia inusual o injustificada y que no supone en ninguna forma un castigo, sino simplemente una herramienta que le permite a MLB realizar su investigación por el tiempo que necesite y al jugador recibir su salario hasta que se esclarezca su situación.
Esta es la segunda ocasión que Julio Urías termina en licencia administrativa luego de que en mayo de 2019 la MLB abrió una primera investigación que terminó con 20 partidos de suspensión para el lanzador por discutir y lanzar al suelo a una mujer, lo que provocó su arresto y el pago de una multa.
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La licencia administrativa, dentro del contrato colectivo de trabajo
Con la licencia administrativa Julio Urías permanecerá separado del roster de 40 jugadores de su equipo mientras se realiza la investigación relacionada con la política contra la violencia doméstica establecida en MLB, de acuerdo con el Acuerdo Colectivo de Trabajo (CBA), aunque recibiendo su pago y con su tiempo de servicio computándose hasta que la liga culmine con su investigación.
De tal modo y “hasta nuevo aviso”, Julio Urías no tendrá acción en la lomita, debido a esta licencia administrativa que, en los términos más llanos posibles, es una variante de la lista restringida, aunque con la gran diferencia de que ha sido MLB quien le colocó ahí, no su equipo, en espera de lo que resulte de las indagaciones y una sanción que se espera ejemplar contra el culichi.
EG