El boxeo es uno de los deportes madre en todo el territorio y es una de las mejores propuestas para hacer una actividad que nos permita dar los mejores beneficios para nuestro organismo.
La disciplina del boxeo nos permite trabajar el cuerpo de forma completa. No sólo nos da una musculatura increíble y ágil, sino que también mejora la actividad cardiovascular.
Para ayudarte de a poco con el boxeo, es necesario que conozcas los cuatro golpes básicos de este deporte. Ponte en guardia, al ataque y presta atención a estas técnicas.
Los golpes básicos del boxeo:
- Jab: El golpe con mayor alcance de los básicos y de los más utilizados, ya que nos permite mantener la distancia del oponente, a la vez de mantener la guardia. El jab consiste en meter un puñetazo con la mano izquierda (si sos diestro) o con la derecha (para zurdos) extendiendo el codo rápidamente de forma paralela al suelo, y retrayéndolo a su posición inicial de forma rápida. Para hacerlo también debemos realizar una ligera rotación de cadera, que nos ayudará a darle más fuerza al golpes y que se pueda realizar de frente.
- Cross o directo: el golpe más utilizado y de mayor potencia que el jab, ya que se ejecuta con la derecha. Es una técnica similar a la del jab, pero en este caso el golpe parte desde atrás (la pierna derecha debe quedar detrás, siempre y cuando sean diestros). Cuando extendemos el brazo para golpear, hay que transferir el peso desde la pierna de atrás a la de adelante, para poder rotar el pie derecho sobre la punta y realizar, así, una leve rotación de cadera.
- Upper o uppercut: De los golpes más importantes y, netamente, 'noqueador', siempre y cuando se realice con la técnica y la fuerza adecuada. Se trata de un golpe de mano hábil y desde abajo: se ejecuta un golpeo en vertical que va a la mandíbula del oponente, una de las zonas más vulnerables del oponente. La clave para esta técnica es la ayuda de las rodillas, ya que debemos hacer una ligera extensión para poder golpear con toda la fuerza de nuestro torso.
- Crochet: Golpe lateral y de mano hábil que va dirigido a la cabeza del rival, aunque también puede ir a la zona baja (riñones). Es un golpe fuerte, pero más lento que el jab o el cross por la trayectoria del brazo. Para realizarlo, se necesita de una rotación de cadera y flexionar las rodillas sin inclinarse hacia adelante, en el caso de encarar para la zona baja.
NOTA: No te olvides de tu guardia. Siempre debes mantener la mano que no usas para golpear en posición (a la altura de la barbilla). Los golpes deben ser rápidos y la mano que golpea debe volver rápidamente a la posición inicial de guardia.