El boxeo es, probablemente, el deporte con las historias más extrañas y surrealistas que hay una vez los atletas deciden terminar su etapa en el profesionalismo. Esto es lo que ocurrió con este pugilista norteamericano, que fue considerado el mejor de su época pero que, tras caer con el Toro Salvaje, comenzó una vida de tristeza tras quedarse sin nada por pagar deudas.
Estados Unidos se ha convertido, históricamente, en una de las cunas del boxeo gracias al nivel que la mayoría de sus pugilistas tienen. En el pasado reciente podría mencionarse a Floyd Mayweather Jr, quien se retiró del ring invicto y que es considerado por muchos el baluarte de este deporte en su larga historia.
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Sin embargo, mucho tiempo antes de él estuvo Walker Smith Jr, quien era conocido en el argot deportivo como Sugar Ray Robinson, que estuvo activo en dos décadas distintas y que, pese a ser considerado el mejor de su época, la derrota contra el Toro Salvaje y sus problemas al momento de pagar deudas lo hicieron fallecer en el olvido de la afición.
Robinson, el mejor de su época que perdió con Toro Salvaje y que terminó pagando deudas
Sugar Ray Robinson nació el 3 de mayo de 1921 en Georgia, Estados Unidos. Desde pequeño demostró el cariño que siente por el boxeo, deporte en el que combatió de manera profesional a través de los pesos medio y wélter.
Antes de su etapa como profesional este tuvo un total de 85 victorias en el ambiente amateur, consagrándose así como uno de los prospectos más importantes del país y del continente en general. Fue así cuando llegó al profesionalismo con 19 años, consolidándose como uno de los mejores pese a su edad.
Sus virtudes lo hicieron ganar el campeonato de peso wélter, mismo que mantuvo durante cinco años de 1946 a 1951. Un año después tomó la decisión de retirarse; sin embargo, volvió al ring para recuperar el cinturón tan solo tres años después, obteniendo así el récord como primer boxeador en ganar el campeonato del mundo por quinta vez en la historia tras un nuevo trofeo en 1958.
Ray Robinson se retiró del boxeo de manera oficial con un palmarés de 202 peleas, mismas en las que obtuvo 175 triunfos (108 por la vía del cloroformo), seis empates y 19 derrotas. La gran mayoría de estas se dieron en la debacle de su carrera, por lo que la más recordada fue la vivida frente a Toro Salvaje en 1943, cortando así una racha de 40 victorias seguidas.
Tras su salida del profesionalismo, y tal y como ocurre con algunos de los deportistas más importantes de su época, Sugar Ray despilfarró la mayoría de su dinero en cosas materiales que no le duraron para siempre. Pronto, este comenzó a tener problemas con el gobierno de Norteamérica por el pago de impuestos que no realizó en su etapa como boxeador.
Es así como Robinson terminó su vida pagando un sinfín de deudas que no le permitieron disfrutar de su vejes. Así, el norteamericano abandonó este mundo el 12 de abril de 1989 en California; sin embargo, los amantes más longevos del boxeo aún recuerdan a un pugilista que fue incorporado al Salón de la Fama de este deporte un año después de su muerte.
AC