Para el mundo entero es una realidad que los boxeadores aztecas son uno de los mejores de todo el mundo, pese que en muchas ocasiones no han tenido los mejores resultados. Tal y como ocurrió con este mexicano que habría vencido de manera contundente al extraordinario Floyd Mayweather pero que ahora se encuentra en el total olvido.
Si bien existen personalidades como Jorge Arce, Salvador Sánchez, Julio César Chávez, Marco Antonio Barrera, Erick Morales y, recientemente, Canelo Álvarez, existió un pugilista que obtuvo grandes victorias a lo largo de su carrera, pero que de alguna forma la historia no dejó bastante abandonado.
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La garra, tenacidad y resistencia de los atletas de nuestro país ha quedado bastante clara arriba del ring y es reconocido alrededor de todo el mundo, por lo que no nos sorprende que este mexicano protagonizado una de las peleas más importantes en la historia de este deporte.
Mayweather y el día que le robó la pelea a un mexicano
Dentro de los archivos del pugilismo mundial nos encontramos con uno de los exponentes más conocidos, temidos y polémicos de Estados Unidos: Floyd Mayweather Jr., quien a lo largo de su carrera logró obtener un récord de 50 victorias sin conocer la derrota, pero muchos dudan de que esto en realidad sí es cierto.
Y es que, en los inicios de su carrera, claramente sus promotores buscaban llevarlo hasta lo más alto del estrellato pues provenía de una familia con historia dentro del boxeo, por lo que a como ir al lugar tenía que ser llevado de una manera exitosa.
No obstante, parece que a sus entrenadores se les olvidó que para vencer a un guerrero azteca se requiere de mucho más que horas de entrenamiento, es necesario estar dispuesto a llevar la pelea a los últimos rounds con una cantidad inimaginable de golpes.
Es por ello que cuando el campeón de peso ligero, José Luis "el Temible" Castillo, se paró frente a él en su pelea en el MGM Grand de Las Vegas y le propinó una severa golpiza, su invicto estuvo totalmente en peligro, aunque los jueces dirían otra cosa.
El encuentro ocurrió el 20 de abril del 2002 cuando Mayweather llegó al cuadrilátero con 27 victorias teniendo un paso importante en el peso superpluma, por lo que sus entrenadores pensaron que lo ideal era subir de división y enfrentar al campeón actual.
Pese a que gran parte del público, los comentaristas y hasta los jueces daban por ganador al mexicano, al final de cuentas el anunciador indicó que había un nuevo campeón del peso pluma y a este representaba a los Estados Unidos, situación que rápidamente indignó al gremio y reclamaron una revancha.
Posterior a la pelea, el Compubox (utilizado para contabilizar los golpes que intenta y logra cada uno de los peleadores) reveló que Castillo habría conectado 203 de los 506 intentos que realizó; mientras que Mayweather intentó 448 golpes y solo pudo concretar 157, una diferencia sumamente notable en su rostro que reflejaba el poderío de los puños aztecas.
Con todo y qué tanto el físico como la tecnología aprobaron que Castillo había ganado claramente el combate, la pelea quedó en manos del norteamericano de quien ya conocemos cómo terminó su historia.
Hasta ahora, José Luis Castillo fue el mexicano que logró ganarle a Floyd Mayweather de manera legal y acumuló un récord de 80 peleas de las cuales logró ganar 66 y 57 de ellas fueron por la vía del nocaut, un registro nada despreciable, pero ni que no logró sacar del olvido a su protagonista.