"No fue penal" se ha convertido en una de las frases más utilizadas por el amante del fútbol en México. Recordada (para mal) es esa jugada sobre el final del partido de octavos de final donde Arjen Robben se tira por una supuesta infracción de Rafael Márquez. El penal y el gol decretó la eliminación de la Selección Mexicana del Mundial de Brasil 2014. Otra vez en octavos de final...
Aquel México de Miguel Herrera hizo las cosas bien ante un duro combinado neerlandés, que se subió al podio con el tercer lugar tras vencer a Brasil en dicho encuentro, luego de perder las semifinales por penales frente a Argentina. Si ese penal de Robben no hubiera sido sancionado, quizás diferente hubiera sido la suerte para la propia selección holandesa como para el Tri.
Seguir leyendo ...
Tras un primer tiempo con pocas situaciones de juego, en la segunda parte, Giovani Dos Santos abrió el marcador con un golazo desde fuera del área. El festejo de todo México, de los jugadores, del Piojo Herrera (de forma tan vehemente que se volvió viral) nos hacía ilusionar.
Sin embargo, a partir de ese tanto, el equipo decayó considerablemente en juego. Holanda nos pasó por arriba y sufrimos. Primero, con un cabezazo de Stefan de Vrij que Guillermo Ochoa sacó a puro reflejo y con la ayuda del palo, nos salvamos del primero, pero no por mucho, ya que al minuto 87, Wesley Sneijder agarró un rebote y clavó un golazo junto al palo para igualar el partido.
México resistió como pudo, pero los fantasmas llegaron y, sobre el final, apareció la maldita jugada de Robben por el sector derecho. La pierna del capitán Márquez corta al delantero holandés y el árbitro Pedro Proença decretó el penal. Gol de Klaas-Jan Huntelaar y Holanda a octavos. México, con la misma historia de los últimos años y la maldición de los octavos de final.
¿Qué hubiera pasado si no cobraban el penal de Robben?
¿Habría sido diferente la historia si Robben no se tiraba o si el árbitro Proença no marcaba el penal? Difícil. En primer lugar, porque es más que claro que hubiesen ido al tiempo extra y con la actitud de Holanda en el segundo tiempo, donde sometió a la Selección Mexicana, podría haberse repetido la historia.
A su vez, Herrera no tomó buenas decisiones en los cambios. Sacar a Dos Santos y a Oribe Peralta para poner a Chicharito Hernández y a Javier Aquino no dio buenos resultados. México se metió decididamente atrás y Holanda fue mejor.
Quizás alguna jugada aislada del Chicharito podría habernos dado la clasificación, pero el desgaste físico y las mejores individualidades le habrían dado el pase a cuartos de final a Holanda. Es decir que, probablemente, no hubiese existido un cambio de resultado si no se hubiese cobrado el penal a Robben.
De todas maneras, el sabor amargo de haber quedado afuera de forma injusta por el "No fue penal" quedará impregnado en la rabia de los mexicanos, esa que es característica en cada partido de los octavos de final de los últimos mundiales.
HA