La Juventus de Turín levantó un nuevo trofeo en el futbol de Italia. Con Cristiano Ronaldo y compañía, el cuadro dirigido por Andrea Pirlo derrotó al Atalanta por 1-2 y conquistó la Copa Italia en el Estadio Mapei.
El partido, sin embargo, no fue sencillo para la Vecchia Signora. Aunque empezó ganando con el gol de Dejan Kulusevski (31'), los visitantes se vieron alcanzados con el tanto de Rusian Malinosvkyi (41').
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A partir de entonces, los dirigidos por Pirlo apostaron por las individualidades. No apareció Cristiano, por más que lo intentó y su presencia produjo una atención constante por parte de los zagueros del Atalanta.
Cuando el juego parecía irse a los tiempos extra, apareció el gol salvador de Federico Chiesa, a los 73 minutos, dando casi por sentenciada la derrota para los locales. El golpe fue determinante, sobre todo en la parte anímica.
En medio de los rumores sobre una posible salida de Cristiano Ronaldo, la Juventus se levantó y volvió a darle un trofeo a sus aficionados. Antes, quedó eliminado de la Champions League y a 13 puntos de distancia del campeón Inter de Milan en la Serie A italiana.
Rafael Tolói, producto de la desesperación, dejó con un hombre menos a los locales al 88'.
AJ