No cabe duda de que Cristiano Ronaldo es uno de los mejores futbolistas de la historia, probablemente la disciplina es una de sus mayores virtudes porque demostró al mundo que con trabajo duro es posible llegar a la cima, sin embargo, el legendario jugador padece una afección incurable y aquí te decimos de qué se trata.
Si algo ha dejado claro CR7 es que el cuerpo es un templo que debe ser tratado como tal, él presume una figura envidiable a sus 37 años, no bebe alcohol porque eso le quitó a su padre, no tiene tatuajes porque constantemente dona sangre y hasta ha buscado inculcar los buenos hábitos a sus hijos.
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“Veremos si mi hijo llega a ser un gran jugador, aún no lo es. A veces bebe sodas y come papitas, él sabe que no me gusta”, dijo el portugués en una ceremonia de los Globe Soccer Awards.
Y a pesar de que incluso posee un nivel de grasa muy bajo en el sistema, el cinco veces ganador del Balón de Oro lleva algunos años lidiando con un padecimento sin remedio…
¿Cuál es la afección que tiene Cristiano Ronaldo?
La afección que padece Cristiano Ronaldo es la Tendinosis Rotuliana, también conocida como rodilla del saltador; como bien lo dice su nombre, es una lesión en el tendón rotuliano, el tejido que conecta la rótula con la tibia, según información del canal Gol 90.
El tendón se encarga de hacer que funcionen los músculos que extienden la rodilla, es probable que CR7 cuente con la dolencia por sus constantes saltos y todo comenzó en 2014 cuando se le diagnosticó una tendinitis; evidentemente podría causar dolor, rigidez e inflamación.
Para que la tendinitis no se hiciera más grave, el lusitano tuvo que haber dejado de competir al menos ocho meses, justo como lo hizo Rafa Nadal en 2021, sin embargo, su espíritu competitivo pudo más y llegó a disputar partidos con mucho dolor.
Queda claro que eso empeoró la situación hasta volverse tendinosis, una degeneración gradual de la rodilla que no tiene tratamiento, lo que obligó al jugador a cambiar su estilo para forzar menos la articulación.
Cristiano tuvo que seguir con una preparación especial que le absorbía mucho tiempo, aunque trajo importantes trofeos a sus vitrinas y veremos con el paso del tiempo cómo se desarrolla la lesión o si el portugués encuentra la forma de que no afecte su vida cotidiana tras el retiro.