Inolvidable para la afición auriazul, el delantero argentino Bruno Marioni traicionó a los Pumas de la UNAM cuando Óscar Ruggeri lo invitó a incorporarse a las filas de las Águilas del América y este respondió que sí, aunque nunca se incorporó al equipo de Coapa no porque no quisiera, sino por esta increíble razón que aquí te mencionamos.
Aunque jugó con los Diablos Rojos del Toluca, Rojinegros del Atlas, Tuzos del Pachuca y Tecos, Bruno Marioni vivió sus mejores momentos como futbolista en los Pumas de la UNAM, ganando los títulos de Liga MX y de goleo individual en la misma temporada 2004, convirtiéndose en un ídolo de la afición gracias a sus 34 anotaciones en 57 partidos disputados con los universitarios, pero que el América quería.
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De jugador leyenda a corredor de autos y entrenador
Tras finalizar su carrera como jugador en Estudiantes Tecos, Bruno Marioni decidió olvidarse momentáneamente de los Pumas, del América y hasta del futbol para incursionar en el automovilismo, gracias a una invitación para probar un automóvil de la categoría monomarca Fiat Linea Competizione y debutando en 2010, convirtiéndose en el primer campeón de la Abarth Punto Competizione en 2012 y obteniendo así su primer título en el deporte motor.
Ah, pero los viejos tiempos y el olor a pasto llamaron nuevamente a Bruno Marioni a México, donde debutó como director técnico el 29 de enero de 2017 con Venados de Yucatán, para el 27 de enero del 2019 llegar nuevamente a los Pumas, aunque como entrenador tras la salida de David Patiño y el 4 de febrero de 2022 a Tepatitlán F.C.
Así convenció Ruggeri de irse al América a Bruno Marioni
Aunque todos los aficionados de Pumas lo consideran uno de sus máximos ídolos, nadie se imaginaba que Bruno Marioni los traicionó cuando Ruggeri lo invitó al América, pero así fue y solo no jugó con las Águilas pues se cerró la contratación del Piojo López, según confesó el mismo ex jugador en entrevista con Burro Van Rankin en Caliente TV.
“Después de salir campeón y goleador me voy a España y me quedo en Tenerife. Me tenía que operar, me estaba rehabilitando y recibo un llamado de Óscar Ruggeri, entrenador del América. Entonces me dice: ‘¿Qué vas a hacer?’. ‘Voy a recuperarme, no sé si me quedo acá o me voy a otro lugar’. Me dice: ‘Estoy viendo la posibilidad de traer un delantero, estoy negociando con Piojo López, pero si no se da, ¿te interesaría venir?’. Dije: ‘Sí’”, confesó.
EG