A los 89 años de edad, Just Fontain falleció este miércoles 1 de marzo como la más grande leyenda del futbol francés y una de las más legendarias glorias del balompié internacional, al imponer un récord goleador en los Mundiales que difícilmente podrán romper las nuevas generaciones, pero que él quería que lo quebrara Lionel Messi, a quien consideraba la reivindicación del jugador de su talla: pequeño de estatura y de peso. Entérate quién fue.
Si todavía no sabes quién fue, Just Fontaine era el último sobreviviente del tridente ofensivo que formaba en el club Stade de Reims con Raymond Kopa y Roger Piantoni, fallecidos en 2017 y 2018, junto a quienes llevó también a Francia a semifinales de la Copa del Mundo de 1958, un logro sin precedente y con récord en Mundiales para Les Bleus, hasta que el Brasil de Pelé le cerró el paso.
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Como jugador, la carrera de Just Fontaine en clubes y Mundiales se vio cortada brutal y abruptamente a finales de 1962, cuando a sus apenas 28 años se retiró tras una doble fractura en una pierna: “Se habla mucho de mi récord, pero lo hubiera cambiado gustosamente por cinco o seis años más (de jugador), el futbol era mi pasión. Estaba en la cima, ganaba mucho dinero para aquella época. No eran las sumas actuales, ganaba como cinco veces el salario mínimo del momento”, explicó en 2013. Checa quién fue.
En los Mundiales, este es el récord que Just Fontaine deja
Aunque como entrenador su trayectoria fue mucho menos gloriosa con Francia con apenas dos partidos en 1967, pudo ascender a primera división al París Saint-Germain en 1974 y hacer tercero a Marruecos en la Copa de África de 1980. En las últimas cuatro décadas no se alejó del futbol y aseguraba ver por televisión todos los partidos que podía, aunque en los últimos años sus problemas de salud se lo impedían.
Como jugador del Stade de Reims y la selección de Francia, Just marcó en Suecia 1958 el récord de 13 goles en una sola edición de la Copa del Mundo que provocó que en 2012 fuera inducido al Salón de la Fama aquí en México, donde reveló que su secreto para marcar tanto era fácil: tirar en el momento justo y nada más.
Algo que aplicaba al parecer también a nivel de clubes, pues anotó 259 goles en 283 partidos para ser considerado toda una leyenda del Stade de Reims que alcanzó la final de la Copa de Europa en 1959 y con el que ganó tres títulos de la primera división francesa: “Una estrella del futbol francés. Un delantero excepcional. Un jugador legendario del Reims… A su familia… El Stade de Reims envía sus más sinceras condolencias”, fue el mensaje del club al conocerse su fallecimiento, mientras que otros clubes como el Paris Saint-Germain, actual campeón de Francia, también lamentaron su pérdida.
EG