Nunca se lo imaginó, pero así es: después de escapar de la guerra en Serbia a irse a jugar a España, Veljko Paunovic está a solo un paso de convertirse en un histórico de Chivas, al lograr un campeonato de la Liga MX que desde 2017 se les niega y que ante Tigres podría lograr la noche de este domingo 28 de mayo en el Estadio Akron.
Con una generación promisoria de futbolistas con las que, incluso, podría ganar el campeonato y hacer una dinastía, Paunovic ya dejó atrás aquellas épocas beligerantes de bombazos y balazos en la guerra para vivir una época de ensueño de aplausos y reconocimientos con las Chivas, igual o quizá hasta mejor de la que gozó cuando era futbolista.
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Tras agarrar a unas Chivas sumidas en crisis y con la mira de emular al argentino Matías Almeyda con una Liga MX, una Copa y una Concachampions, de la mano del histórico Fernando Hierro el serbio nacionalizado español Paunovic asumió el compromiso de olvidarse de los sinsabores de la guerra para ganarse la confianza de sus jugadores, llegar a la Liguilla, eliminar a sus dos más grandes y acérrimos enemigos Atlas y América y estar a un paso de un muy anhelado campeonato.
Veljko Paunivoc podría ser histórico de Chivas si consigue el título
La muerte de Josip Broz Tito trajo la desintegración de la antigua Yugoslavia, así como el odio y la brutalidad de la guerra que afectaron a la familia Paunovic cuando la OTAN bombardó con 78 días de misiles lo que hoy es Serbia, para forzar la rendición de Slobodan Milosevic.
Entre hollín y estruendos, Veljko no lo pensó más y a sus 20 años escapó con lo único que traía puesto, abandonando al Partizán de Belgrado para irse a España con el Marbella y luego con el Atlético de Madrid, Oviedo, Mallorca, Tenerife, Getafe, Almería, Hannover (Alemania) y Rubin Kazán (Rusia) y retirarse a los 31 años para ahora, ya como entrenador, estar a solo un paso de volverse histórico de las Chivas.
Pero todo gracias a ese indomable carácter y gran determinación que lo llevaron a escapar de la guerra cuando, siendo todavía un adolescente, los serbios eligieron a Milosevic como presidente en 1987 y este desencadenó el conflicto bélico contra los croatas y los bosnios, dejándole cicatrices invisibles a la vista, pero que todavía duelen.
EG