Lo que son las cosas: Así como en su momento reconocieron el argentino Diego Armando Maradona en el Mundial de México 70 ante Inglaterra y Thierry Henry en la eliminatoria mundialista rumbo a Sudáfrica 2010 contra Irlanda, ahora fue turno del español Gerard Piqué de confesar en la Kings League que su histórica mano con el Barcelona de 2009 en la Champions contra el Chelsea sí fue penal.
Así como lo leíste: A poco menos de cumplirse 15 años, el zaguero español Gerard Piqué, creador de la King’s League, reconoció haber cometido mano en aquel también histórico encuentro con el Barcelona en la vuelta de semifinales de la Champions contra el Chelsea en Stamford Bridge, que le sirvió al equipo culé para llegar a la final que posteriormente ganarían frente al Manchester United.
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Así fue la mano de Gerard Piqué ante el Chelsea
Mientras Maradona hizo su inolvidable Mano de Dios en las semifinales de México 70 ante Inglaterra y Thierry Henry en las eliminatorias rumbo a Brasil 2010 contra Irlanda, el creador de la King's League, Gerard Piqué, cometió su trampa en 2009, cuando el partido contra el Chelsea se convirtió en uno de los más polémicos no solo de la Champions, sino de la historia, debido a que en una posición antinatural contactó la pelota con la mano dentro del área, lo que era un penal clarísimo en favor de la escuadra inglesa, pero que el árbitro simplemente no marcó.
En su programa de anécdotas en la King's League, finalmente ahora Gerard Piqué reconoció que sí habría hecho trampa y que su mano debió haber sido marcado como penal, en respuesta a DjMariio después de que el streamer le preguntara por la famosa acción contra el Chelsea cuando debatían alegremente sobre un posible penalti para PIO en su partido contra El Barrio.
Gerard Piqué reconoce que su mano sí era penal
“No me acuerdo de la mano. Me acuerdo de la jugada y creo que ahora se pitaría”, fue como Gerard Piqué respondió respecto a su polémica mano en Stamford Bridge, donde todavía no se aplicaba el Video Assistant Referee (VAR) en todos los juegos oficiales avalados por la FIFA y que seguramente, en aquel entonces, le hubiera dado el cobro de la pena máxima al Chelsea, lo que hubiera cambiado toda la historia de aquella semifinal de Champions.