Sergio Checo Pérez se ha convertido en un animador de la Fórmula 1 con sus más recientes actuaciones, sobre todo después de llegar a Red Bull Racing en 2021, un equipo competitivo que pudo darle un auto lleno de virtudes y potencial para sacar lo mejor de él como piloto. Pero también se ha podido ver un poco más de su calidad humana y forma de ser como persona, lo cual quedó aún más reflejado durante la calificación para el Gran Premio de Arabia Saudita, donde el mexicano consiguió su primera pole position.
La alegría se desbordó por la proeza del tapatío, que precisamente cumple 11 años de carrera en la máxima categoría del automovilismo. No sólo en Red Bull o México celebraron, también en otras partes del mundo y en otras escuderías, lo dejó una postal para el recuerdo y para comprobar la forma de ser de Checo, así como su calidad como persona.
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El piloto mexicano se apoderó del primer lugar en la calificación para el GP de Arabia Saudita, después de hacer una excepcional vuelta, casi perfecta, superando así a Lando Norris, Carlos Sainz —ambos pilotos de Ferrari que terminaron segundo y tercero, respectivamente— así como a su compañero de equipo Max Verstappen, que terminó cuarto y dijo que la pole era muy merecida para Checo Pérez, quien el año pasado le ayudó a ser campeón del mundo por primera vez.
La felicidad de Checo se notaba a kilómetros de distancia. Su primera pole en 11 años es uno de sus más grandes logros, sin importar el tiempo que tardó, pues se trata de trabajo duro, de eso están convencidos todos aquellos que formaron parte en algún momento del equipo del tapatío, con quien formaron una foto para ser enmarcada.
Después de la calificación, los mecánicos de Aston Martin —antes Racing Point— celebraron el podio de Checo Pérez, pues anteriormente habían trabajado de la mano de él cuando portó los colores rosas, en ese entonces, de aquella escudería. Pero no fueron los únicos, pues también se acercaron a la malla quien fuera el fisioterapeuta de Checo en Sauber y Luis Álvarez, su asistente que lo ha acompañado ya por varios años. Además un grupo de fotógrafos, encabezados por José Maria Rubio, con más de 600 Grandes Premios tomando fotografías.
Esto deja ver la calidad humana de Checo Pérez, quien ha salido en buenos términos con sus compañeros pese a algunas malas relaciones con los dueños o jefes de equipo, quienes no han visto en el mexicano a un piloto de élite, sin embargo se ha convertido en uno de ellos y, además con humildad para mantener lazos, reconocimiento y cariño de quienes le han visto crecer en la F1 y con quienes incluso mantiene una amistad.