Checo Pérez puede respirar tranquilo, al menos de momento, pues a pesar de que Daniel Ricciardo supuestamente había llegado para tomar su lugar en Red Bull, la escudería austriaco mejor decidió correr a Nyck de Vries y mandar al australiano a tomar su lugar en lo que resta de la temporada de F1.
Aunque Red Bull tenía la oportunidad histórica de sentar a Max Verstappen una vez que el bicampeón neerlandés amarrase el título de pilotos para así buscar un histórico 1-2-3 con Checo Pérez y Daniel Ricciardo, Chris Horner y compañía decidieron mejor darle las gracias a De Vries el pasado GP de Gran Bretaña para dejarle su volante al australiano, quien marcó su regreso a F1 en una prueba de llantas con la escudería austriaca en Silverstone.
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Salida de De Vries beneficia al Checo Pérez en Red Bull
La salida de Nyck de Vries beneficia a la permanencia de Checo Pérez en Red Bull, pese a sus últimos malos resultados, pues Daniel Ricciardo se perfilaba como posible sustituto del mexicano a final de temporada, aunque con este enroque el volante tapatío apunta a mantener su volante por lo menos una o dos temporadas más en F1, pues como dijo Horner: “Su permanencia nunca ha estado en discusión”.
Como sea, el regreso a F1 de Daniel Ricciardo para el GP de Hungría, del 21 al 23 de julio, se concretó mientras el australiano probaba neumáticos para Red Bull en Silverstone, cuando ante los malos resultados de De Vries, según el diario De Telegraaf, la escudería decidió despedirlo inmediatamente y reemplazarlo.
El hilo se rompió por lo más delgado: Nyck de Vries
Aunque en 2022 Nyck de Vries había tenido un debut deslumbrante al sustituir al enfermo Alex Albon en el GP de Monza para Williams y terminar noveno, este 2023 tuvo una decepcionante temporada que solo duró 10 carreras y en la que se unió a Logan Sargeant (Williams) como los únicos dos pilotos que no han sumado puntos en la actual temporada, debido a un desempeño muy pobre con relación a su coequipero japonés Yuki Tsunoda.
De hecho, De Vries apenas logró una duodécima posición en Mónaco, por lo que Red Bull puso desde entonces la lupa sobre él, confirmándose su despido y el regreso de Daniel Ricciardo a la escudería austríaca, que dejó a fines de 2018 para irse primero a Renault, luego a McLaren y volver al paddock después de medio año como piloto de reserva de la escudería austriaca.
EG