Su papá lo abandonó, su mamá murió en el parto, trabajó desde niño y hoy es medallista paralímpico

No cabe duda que, los atletas que han puesto el nombre de México en alto en estos Juegos Paralímpicos 2024, son unas verdaderas leyendas, como el caso de Arnulfo Castorena, quien hizo resonar fuerte el himno nacional en el Centro Acuático de París cuando se hizo con el oro en la división Sb2, y con ello el mexicano puede presumir que es su cuarta vez que sube al podio durante toda su carrera, la cual ha sido complicada desde que nació, ya que su papá lo abandonó, su mamá murió durante el parto y desde niño tuvo que trabajar para hoy ser un medallista. 

Pero este camino lleno de éxito no ha sido nada fácil, y desde su nacimiento tuvo que sobrepasar con oro y honores las pruebas que la vida le presentaría. José Arnulfo Castorena Vélez sólo cuenta con un recuerdo de sus padres, y es el apellido, ya que su papá lo abandonó cuando nació al ver su condición y su madre murió el mismo día que nació este atleta, un 27 de mayo de 1978.

José Arnulfo Castorena Vélez, el medallista olímpico de París 2024 

Desde muy temprana edad fue enviado a un internado, y fue aquí donde conoció a Sor Chiva, una mujer religiosa de esta institución dirigida por monjas, quien se dio cuenta de la facilidad con la que nadaba Arnulfo Castorena, prácticamente ella descubrió el don del hoy medallista paralímpico. El camino de esta leyenda viviente apenas comenzaría su clímax, puesto que, a los 12 años tuvo que regresar a Guadalajara debido a la muerte de su abuela quien lo crió hasta la mencionada edad y quien marcaría su vida, pero,  tras este suceso, las cosas cambiarían drásticamente para el nadador mexicano.

Ya en tierras taparías, el hoy medallista paralímpico de París 2024, tuvo que elegir entre seguir el camino de las drogas y violencia que vivía dentro del núcleo familiar en el que estaba o no, pero gracias a su mentalidad de campeón jamás lo hizo y pese a todos estos problemas, decidió seguir nadando, pero al no contar con los recursos, el atleta decidió trabajar desde muy niño vendiendo chicles en la calle.

Así fue el camino de José Arnulfo ya en el deporte profesional

Cuando cumplió 18 años la vida comenzó a cambiarle, y su hambre de querer ser el mejor lo hizo que conociera a un funcionario del CODE (Consejo Estatal del Deporte de Jalisco), quien lo invitó a un programa para entrenar en el deporte de alto rendimiento, y a partir de ahí, este ejemplo de vida sólo ha cosechado triunfo tras triunfo.

La primera medalla de este nadador se dio en los Juegos Paralímpicos de Sídney cuando se hizo con la presea dorada en la prueba de 50m braza SB2, pero también ganó varias medallas en las olimpiadas de Atenas 2004, Londres 2012, Tokio 2020 y ahora en París 2024.

CA