Aunque son puestos como antagonistas, parece que LeBron James y Stephen Curry no se odian tanto como presumen decir. Una escena llena de deportivismo se pudo notar en la noche del domingo, cuando ambos titanes de la duela se vieron las caras en el partido entre Los Angeles Lakers y Golden State Warriors.
En dicho encuentro, los Lakers derrotaron cómodamente 117-91 a los Warriors, en lo que se puede traducir como una paliza deportiva. Eso no fue impedimento para que ambos basquetbolistas se dieran una muestra de respeto.
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LeBron James, la estrella de los Lakers, solo necesitó de 24 minutos de juego para sumar 19 puntos, 6 rebotes, 4 asistencias, 2 robos y 2 tapones, comandando el triunfo de su equipo en el Staples Center de Los Ángeles.
Por su parte, Stephen Curry sólo sumo 16 y siete asistencias en 26 minutos de juego, al no disputar el último cuarto del encuentro.
Los equipos todavía quieren vencernos y vencernos mal. Todavía tienen muchos recuerdos de los últimos cinco años”, dijo Curry tras el encuentro.
Pero lo más llamativo vino después del encuentro, cuando los dos jugadores tuvieron un breve encuentro, un saludo que para muchos puede ser insignificante, pero para otros puede ser una señal.
Especulaciones
Después de varias versiones de una enemistad entre ambos jugadores, parece que con este gesto se vinieron abajo. Algunos rumores aseguraban que había un odio deportivo después de tener varios desencuentros durante las finales de 2018, entre los Warriors y los Cleveland Cavaliers, donde jugaba LeBron. Ahora parece que puede apuntar para otro lado.
Puede ser que se trate de un guiño. Ambos jugadores pudieron limar asperezas para que algún día puedan jugar juntos, aunque a la carrera de LeBron James ya no le queden tantos años para hacer esto posible.
¿Será que Curry puede jugar algún día para los Lakers?
FDR