Ronaldinho llegó a ser considerado como el mejor futbolista del mundo; sin embargo, su vida dio un radical giro y a sus 41 años atraviesa por un momento bastante complicado.
El astro brasileño cumplió un año más de vida, pero no lo está disfrutando igual, ya no tiene la misma sonrisa, pues es el primero que pasa sin la compañía de su amada madre.
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El exjugador del Barcelona ha organizado varias fiestas y ha tomado en exceso desde que Miguelina Elói Assis dos Santos falleció por Covid-19.
Hace unos días, uno de sus amigos acudió a la prensa para decir que le preocupaba la salud del histórico jugador, quien tiene un serio problema con el alcohol.
Ronaldinho no pudo disfrutar de los últimos meses de vida de su madre debido a que estuvo preso durante casi medio año tras haber presentado documentación falsa en el Aeropuerto de Paraguay.
MANCHÓ SU CARRERA CON SUS ADICCIONES
Ronaldinho comenzó su carrera con el Gremio de su natal Brasil y no tardó en irse a Europa para jugar con el París Saint-Germain de Francia.
El ‘Mago’ se convirtió en uno de los mejores jugadores de la historia por todo lo que hizo en el Barcelona, con el que ganó dos veces La Liga, dos veces la Supercopa de España y una vez la UEFA Champions League.
Tiene varias distinciones individuales; sin embargo, sobresale el hecho de que en 2004 y 2005 ganó el Balón de Oro de la FIFA.
Ronaldinho no dejó las fiestas, su rendimiento disminuyó considerablemente y tras salir del Barcelona jugó con Milán, Flamengo, Atlético de Mineiro, Querétaro y Fluminense, retirándose en 2015.
EG