Caótica mañana se vivió este viernes en la ciudad de León, Guanajuato, luego de que un grupo de representantes del empresario Roberto Zermeño y elementos de la Procuraduría, tomaran a la fuerza el Estadio León.
Ante lo ocurrido, aficionados esmeraldas se dieron cita al inmueble para protestar e impedir que el inmueble fuera asegurado, ante el desalojo del equipo este fin de semana.
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Luego de ser abiertas las rejas de las instalaciones, los seguidores leoneses ingresaron hasta las tribunas y la cancha, para evitar la toma física de Zermeño y Héctor Humberto González, quienes desde 2017 atraviesan una disputa legal con el municipio.
Tras ingresar al estadio, los aficionados se encontraron con el grupo de Zermeño, a quienes les gritaron oportunistas, rateros y demás ofensas y amenazas en contra del empresario que estuviera preso seis años por defraudación fiscal.
Después de un rato se calentaron los ánimos y hasta piedras les arrojaron, además de vandalizar las oficinas del equipo, mismas que ya habían sido vaciadas por la mañana como medida preventiva por parte de Grupo Pachuca.
Además con vehículos bloquearon las salidas principales de inmueble, cerca de 30 automóviles se mantienen hasta el momento sobre la avenida Adolfo López Mateos.
Por su parte el presidente del Club León, Jesús Martínez, aseguró en sus redes sociales que el equipo es del pueblo y el estadio será su casa.
"Nuestra gente y nuestra afición, son las que han dado vida al Club León. Este equipo es del pueblo, y el estadio es su casa. En el Club León, somos de nuestra gente. La llevamos en el alma", escribió en Twitter.
Luego de la gresca los representantes legales de Roberto Zermeño se retiraron del Estadio León al no poder cumplir con la toma física del inmueble, aunque la Fiera difícilmente regresará a las instalaciones.
JV