Después de una serie de indisiciplinas del Chicote bajo la disciplina rojiblanca, parece ahora perdonado.Chivas está en semifinales y Cristian Calderón borró su historial con dos golazos en la vuelta y en total tres en la eliminatoria, con los que el Guadalajara dejó en el camino al América, tercer lugar general, que dice adiós al torneo. El Rebaño se impuso 2-1 en el Estadio Azteca y firmó el 3-1 global.
Chivas pasó por medio del repechaje y ahora sigue vive después de un torneo lleno de polémica. Pero Víctor Manuel Vucetich pudo llevar del séptimo lugar a la llave por el pase a la final, por sus planteamientos y sus apuestas, sobre todo la de apostar por el Chicote.
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Chivas tuvo un inicio vertiginoso. Durante los primeros ocho minutos llegó al menos tres ocasiones. Incomodó y exhibió las falencias americanistas que se presentaron en todo el torneo, aumentadas tras la lesión de Bruno Valdés. Incluso se dieron el lujo de fallar una clara, en un balón elevado a segundo poste que se encontró solo Jesús Molina, pero que remato de cabeza por un lado.
América intentó recomponer y emparejar las acciones. Pero fueron más las equivocaciones de Chivas, fallas en la salida o los pases en medio campo los que le dieron la pelota a los azulcremas, quienes tuvieron un par de disparos: uno a manos de Raúl Gudiño y otro que no pudo alcanzar Federico Viñas en segundo poste.
Al minuto 30 vino el golpe al ánimo local. En un balón perdido en medio campo, Chivas recuperó, le imprimió velocidad al avance y dejó el balón en los pies de Cristian Calderón, en la frontal del área, en la misma altura desde donde anotó el gol en la ida. Desde ahí, disparó de zurda y clavó la pelota en el ángulo para poner el 1-0 y obligó a las Águilas a anotar tres anotaciones.
Antes del final del primer tiempo, América tuvo la pelota, pero sin idea y con imprecisiones siguió sin aparecer. Chivas esperó con cautela y descanso un poco de la velocidad con la que atacó al principio y que le dio la ventaja en el marcador.
Para la segunda parte América salió encima del área de Chivas, pero sin éxito. Guadalajara en cambio tuvo buen manejo de tiempos y aguantó los embates. Henry Martín pudo acortar distancias, pero el Tiba Sepúlveda salvó en la línea.
Fue hasta el minuto 71 cuando cerró el partido el conjunto rojiblanco, nuevamente con el Chicote Calderón, que después de buscar por dónde, casi parado, sacó disparo que llevó al balón a entrar de campana en el archo de Guillermo Ochoa. América necesitó cuatro goles para avanzar.
Cuatro minutos después, Henry Martín por fin pudo meter un gol con el América en Liguilla, pero fue demasiado tarde, aunque América siguió intentando, pese al rengueo de Nicolás Benedetti, los conatos de bronca y los esfuerzos insuficiente y a destiempo del equipo de Coapa.
De esta forma, Chivas rompe una mala marca: la de por fin vencer a las Águilas en cuartos de final, después de verse las caras en siete ocasiones en estas instancias y hasta ahora avanzar a semifinales venciendo al archirrival.
FDR