Conforme van pasando las horas, va saliendo a la luz más información sobre lo que pasó ayer en el partido de Querétaro contra Atlas. Los integrantes de las barras bravas enloquecieron y protagonizaron una sangrienta batalla en el Estadio La Corregidora.
Washington Aguerre contó que le pidió a Fernando Guerrero que parara el encuentro cuando los aficionados comenzaron a pelearse en las gradas, pero el silbante no le hizo caso al portero de los Gallos Blancos.
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“Le dije al árbitro que parara el partido porque se estaban matando en la tribuna y en un momento decidió seguirlo jugando. Ayer había animales en la tribuna, no respetaban a nadie", aseguró en una entrevista con TyC Sports.
Al minuto 60, los jugadores de Querétaro y Atlas corrieron hacia los túneles, pues los aficionados saltaron a la cancha para ponerse a salvo.
Washington Aguerre se quedó en el campo para tranquilizar y ayudar a las personas que entraron en pánico. El entrenador Hernán Cristante también mostró una gran valentía, pues permitió que aficionados que iban con sus esposas e hijos entraran a los vestuarios del Estadio La Corregidora.
Liga MX: ¿Por qué se pelearon las barras de Querétaro y Atlas?
En las redes sociales aseguran que los de seguridad se pusieron muy estrictos con los aficionados del Atlas, pero a los del Querétaro los dejaron entrar con tubos, navajas y hasta con pistolas.
La rivalidad entre estos dos grupos radicales se originó en 2007, luego de que los Zorros les ganaron a los Gallos Blancos y los mandaron al ya desaparecido Ascenso MX.
Al terminar el encuentro, los integrantes de la Resistencia se pelearon con los de la Barra 51 a las afueras del Estadio Jalisco.
EG