Fenerbahçe y Galatasaray ofrecieron una batalla eléctrica en el Sükrü Saracoglu, donde cada detalle pareció inclinar el pulso de un clásico que llegó cargado de tensión desde la previa. El mexicano Edson Álvarez fue titular y tuvo un rol clave en la estructura defensiva local, incluso firmando un gol que terminó anulado por fuera de juego, una acción que encendió el ambiente y elevó la temperatura del partido.
El “Cimbom” golpeó primero gracias a una acción individual de Leroy Sané a los 27 minutos, en la que dejó atrás a Álvarez y a dos defensores antes de que su remate desviado se colara en la portería. Con la mínima diferencia, el líder de la Süper Lig manejó los tiempos y buscó sostener su ventaja apoyado en su solidez fuera de casa. Pero el encuentro jamás perdió intensidad y los blancos continuaron empujando hasta el cierre.
La recompensa llegó en el último suspiro, ya que al minuto 96, Jhon Durán conectó un cabezazo que decretó el empate y desató la explosión en Estambul. Después del gol anulado al mexicano y de un desarrollo friccionado, el conjunto de Domenico Tedesco evitó la caída y mantuvo vivo su invicto como local en una noche dramática.
¿Cómo llegaban Fenerbahce y Galatasaray al clásico?
Fenerbahçe aterrizaba en el derbi con una campaña sólida: 31 puntos (con este empate 32) en 13 jornadas, invicto con nueve triunfos y cuatro empates, un ataque de 30 goles y un rendimiento casi perfecto en casa (cinco victorias y un empate). Youssef En-Nesyri llegaba encendido con siete tantos, mientras que el único tropiezo reciente había sido el empate en Europa League ante Ferencvaros.
Galatasaray, por su parte, defendía su liderazgo con 32 unidades (ahora 33) y el respaldo de tres títulos consecutivos. El equipo de Okan Buruk había atravesado semanas agitadas, con lesiones importantes como la de Victor Osimhen, además de una caída en Champions ante Union Saint-Gilloise. Aun así, su defensa como visitante (solo dos goles encajados en seis partidos) y la presencia de Mauro Icardi como referencia ofensiva sostenían su favoritismo.
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El momento decisivo del clásico
El tanto de Sané parecía suficiente para que el visitante sumara tres puntos más en su camino al tetracampeonato. Sin embargo, la insistencia del conjunto local, la presión de su gente y un cierre a puro empuje terminaron escribiendo otro capítulo inolvidable del Derby de Estambul, marcado por el gol anulado al mexicano y el empate heroico en el último minuto.
