El AC Milan atraviesa un momento crítico en la Serie A. En un partido clave contra el Bologna, en el Estadio Renato Dall’Ara, los rossoneri volvieron a mostrar su falta de identidad y su mal rendimiento colectivo. A pesar de contar con una plantilla poderosa y haber realizado importantes incorporaciones en el mercado de fichajes, el equipo dirigido por Sérgio Conceição sigue sin encontrar un estilo de juego definido y ha dejado escapar puntos fundamentales. Esta derrota por 2-1 no solo evidencia su crisis futbolística, sino que también agrava su situación en la tabla de posiciones.
El partido comenzó con algunas luces para el club milanés, cuando en el minuto 43 lograron ponerse en ventaja gracias a una asistencia brillante del mexicano Santiago Gimenez. Tras un saque largo del arquero, “Bebote” cabeceó el balón con precisión, habilitando al portugués Rafael Leão, quien definió con calidad para el 1-0. Sin embargo, esa chispa de creatividad se apagó rápidamente y el equipo no supo mantener la ventaja. La alegría duró poco, ya que los locales empataron al inicio del segundo tiempo con un gol del argentino Santiago Castro, aprovechando un rebote dentro del área chica que el VAR terminó convalidando.
Con el empate, los rojinegros se mostraron desorientados y sin reacción táctica. Por su parte, “Rossoblù” lo aprovechó al máximo y, en el minuto 82, Dan Ndoye selló la remontada tras una jugada colectiva que nació de un saque lateral. La defensa milanista quedó expuesta y el suizo solo tuvo que empujar el balón al fondo de la red. El desconcierto en el campo reflejó la crisis que vive el equipo de Conceição, que no logra ser competitivo a pesar de sus figuras. Este resultado no sólo significó una derrota dolorosa, sino también un golpe en la clasificación, ya que Bologna superó al Milan en puntos y lo relegó al octavo lugar con 41 unidades.
La asistencia de Santiago Giménez, un destello en medio de la crisis
A pesar de la derrota, uno de los pocos aspectos positivos para el siete veces ganador de la UEFA Champions League fue la actuación de Gimenez. El delantero mexicoargentino demostró su calidad con una asistencia clave para el gol del portugués, mostrando visión de juego y precisión en un momento en que su equipo más lo necesitaba. Su impacto en el partido fue notorio, pero no suficiente para salvar a su equipo, que carece de cohesión y carácter colectivo.
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