Este lunes 21 de abril, tras confirmarse el fallecimiento del Papa Francisco a los 88 años de edad, a las 2:35 am hora argentina, el mundo del deporte y la fe se vistieron de luto. Jorge Mario Bergoglio, el primer pontífice sudamericano y jesuita de la historia, dejó una huella imborrable no solo en la Iglesia Católica, sino también en quienes vieron en él a un líder cercano, humano y apasionado.
Entre quienes expresaron su tristeza por su partida estuvo Lionel Messi, capitán de la Selección Argentina, quien dedicó unas sentidas palabras a través de sus redes sociales: "Un papa distinto, cercano, argentino. QEPD, Papa Francisco", escribió. Luego, el astro sumó: “Gracias por hacer el mundo un lugar mejor. Te vamos a extrañar”, reflejando el cariño y admiración que sentía por su compatriota.
Más allá del deporte, el Papa fue un símbolo de transformación social. Desde su elección en 2013, impulsó una Iglesia más abierta, defendiendo a las comunidades históricamente marginadas, como la LGBTQ+, y promoviendo un mayor protagonismo femenino dentro de la institución.
El emotivo encuentro entre Messi y el Papa Francisco
El vínculo entre el astro argentino y Francisco se remonta a 2013, poco después de que Bergoglio fuera elegido Papa. En aquella ocasión, el Vaticano organizó una audiencia especial para recibir a las selecciones de Argentina e Italia, en la antesala de un partido amistoso en homenaje al nuevo pontífice.
Aunque lesionado, Messi viajó para entregar personalmente obsequios al Santo Padre: recuerdos futboleros, una camiseta de la Albiceleste, un banderín y un retrato de René Pontoni, el jugador favorito del Papa.
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El momento fue profundamente emotivo. El Papa, con su habitual humor, se refirió a la naturaleza "desordenada y desprolija" de los argentinos, arrancando sonrisas y también lágrimas, entre ellas las de Messi, que se mostró visiblemente emocionado. Más tarde, el capitán argentino declaró que fue "una jornada inolvidable" y destacó su orgullo de compartir ese instante tan especial con alguien que, como él, representaba a su país.
El legado del Papa Francisco en el fútbol argentino
La relación entre el máximo representante de la fe católica y el fútbol siempre fue estrecha. Fanático declarado de San Lorenzo de Almagro, nunca ocultó su pasión por el deporte como herramienta de encuentro y transformación social.
Como recuerda la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) en su comunicado de despedida, Bergoglio utilizó al balompié como un lenguaje universal para promover valores como el respeto, la responsabilidad y la humildad.
Durante su pontificado, Francisco no solo recibió a leyendas, como Diego Maradona, sino que también celebró la histórica Copa Libertadores conquistada por su amado San Lorenzo en 2014. De hecho, su entusiasmo por el fútbol llevó a reforzar los lazos entre la fe y el deporte, consolidando la idea de que ambos caminos podían servir para unir comunidades y construir un mundo más justo.
