Un fin de semana de luz y sombra fue el que se vivió en la F1 hace unas horas con el Gran Premio de Bahréin: Ferrari volvió a la cima de la mano de Charles Leclerc y se vivió una fiesta en el equipo italiano, mientras que Red Bull vio cómo el podio se le iba de las manos después de una falla en el RB18 y a ello se suma una broma pesada de monegasco tras el abandono de Checo Pérez.
El piloto mexicano reportó por la radio que había un problema con su vehículo, recibió indicaciones de que continuara con todo lo que le quedaba para llegar a la bandera de cuadros, pero no lo logró y se quedó a escasos segundos de conseguirlo, su monoplaza simplemente se paralizó en una curva.
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Fue precisamente en la última vuelta cuando Leclerc dijo que había un contratiempo con su motor, luego entre risas dijo que estaba bromeando y al instante le reportaron la situación del conductor tapatío.
"Tenemos doble bandera amarilla en la recta principal, Pérez se detuvo en la Vuelta 1”, le dijeron.
El chiste de Charles coincidió con el problema del Checo, sin embargo, no fue un ataque directo, sino que hacía referencia a una falla mecánica que en 2019 le quitó la posibilidad de subir al podio en el mismo circuito.
"Estoy seguro que le dio un ataque al corazón a algunos ingenieros, pero todo estaba bien. Estoy muy feliz que esta vez hayamos traído el triunfo a casa", dijo el piloto de Ferrari al finalizar el GP de Bahréin.
¿Qué falló en el auto del Checo Pérez?
Instantes después de que su auto de detuviera, el Checo Pérez explicó que había perdido el motor de su RB18 y posteriormente dio detalles de lo sucedido, aunque se especula que hubo una avería en la bomba de combustible.
“Perdí el motor, simplemente bloqueé las ruedas traseras por completo y no pude hacer nada. Parece que fue un problema muy similar al que tuvo Max”, contó Sergio.
DRM