Así como en los deportistas de alto rendimiento existen historias de drama y éxito, en la farándula pasa lo mismo. Eso comparten algunos sujetos: salen de la nada para tenerlo todo; lo tienen todo para después tocar fondo. Aunque no siempre se reduce a ello, al menos en lo segundo se sumergió el actor Rafael Amaya, quien da vida a Aurelio Casillas en "El Señor de los Cielos".
La serie que ha causado mucha expectación y seguimiento a lo largo de sus temporadas, pusieron en la cima al actor, quien no pudo driblar las adicciones y se hundió en el alcohol y las drogas.
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Ante ese escenario, las personas que lo rodeaban pensaron en hacer algo para ayudarlo. Roberto Tapia, amigo del actor, Fatima Amaya, hermana, y su mánager Karem Guedimin, lo llevaron hasta Sinaloa para ingresarlo a una clínica de rehabilitación.
Después de su desaparición en la serie, reapareció para una actuación especial en 2019. Tras una dura lucha, confesó haber tenido sus problemas con las adicciones.
Quien también dio testimonio de ello fue Julio César Chávez, el retirado boxeador dueño de la clínica a la que fue ingresado el actor. La leyenda del pugilismo mexicano compartió la forma en la que recibieron a Amaya.
Cuando llegó, la verdad no le quisimos decir a Rafa, pero sí llegó un poco sicótico, todavía creyéndose el señor de los cielos. Pero pasaron los días y ahora meses, y la evolución de Rafa ha sido increíble”, cuenta Chávez, quien también ha combatido sus propias adicciones. “Es un hombre noble. Como todo ser humano, tenemos errores en la vida. Lo difícil no es caer, lo difícil es levantarse y eso hay que valorarlo”.
Ahora el actor se encuentra recuperado y se ha hecho cercano al ex boxeador y a su familia. Incluso apareció en la última pelea del Junior. Amaya vivió para contarlo.
Estoy profundamente agradecido con todas las personas y con Dios, que es el que tiene las riendas de mi vida y ha tenido —solo que no me daba cuenta porque estaba anestesiado y no sentía nada (...). Con todas las bendiciones que se han presentado otra vez siento que renací. Tengo fe, tengo amor, esperanza, planes”, dijo el actor tras superar sus problemas con las adicciones.
FDR