En una de las historias más impactantes de Exatlón México, esta querida participante que perdió a su hijo de tres años en un terrible accidente no solo encontró el amor, sino incluso abandonó dos ocasiones el reality de TV Azteca, para luego de perder a dos familiares durante la pandemia por Covid-19 finalmente dedicarse a la política, en la que sufrió un triste y lamentable secuestro.
Se trata de una velocista que ha tenido una historia llena de tristeza y tragedias a lo largo de su vida, pese a ser una querida participante del Éxatlón México, pues como si de una maldición se tratara no ha podido llegar a una final al tener que abandonar hasta en dos ocasiones el reality de TV Azteca, además de que fue víctima de un secuestro.
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Así fueron los abandonos de esta leyenda roja
Antes de sufrir un terrible secuestro, en la segunda temporada esta querida participante del Exatlón México tuvo que abandonar las competencias al sufrir una terrible fractura a tan sólo unos días de haber iniciado su participación. En la cuarta edición y luego de haber llegado a las semifinales, lamentablemente también decidió renunciar a la competencia pues dos de sus familiares estaban muy graves por Covid-19. Desgraciadamente, fallecieron.
Por si eso fuera poco, tras salir del Exatlón México esta querida participante decidió olvidarse definitivamente de las competencias para explorar su faceta en la política como candidata a la presidencia municipal de Valle de Bravo, donde vivió momentos de terror al ser víctima de secuestro y luego ser liberada por narcotraficantes del Cártel de la Familia Michoacana.
Leyenda del Exatlón México fue secuestrada por el narco
Se trata de Zudikey Rodríguez, quien luego de encontrar el amor en el Exatlón México al lado de su ahora esposo Pato Araujo decidió incursionar en la política el pasado 1 de mayo, cuando se dio a conocer que la ex integrante de Titanes debutaría como candidata de la coalición PRI-PAN-PRD para la presidencia municipal de Valle de Bravo.
Pero lo que parecía una inspiradora oportunidad para Zudikey Rodríguez cobró tintes macabros y la puso en una posición de vida o muerte, cuando el 17 de mayo fue “levantada” tras un acto de campaña y llevada a Tejupilco, al sur del Estado de México, donde uno de sus captores, en compañía de un grupo armado, le advirtió: “Mira, Zudy, me han ordenado matarte, pero voy a perdonarte la vida. Solo te pido que te escondas y que te bajes de la campaña”, antes de soltarla y quedar bajo la supervisión de un vehículo que la vigilaba.