Los años no se notaron en Jackie Nava. La veteranía la dejó abajo del ring y se puso al tú por tú ante la juventud de Marisol Corona, a quien derrotó por decisión unánime tras 10 rounds.
La contienda se realizó en la división Supergallo pactada a dicho número de rounds. A sus 40 años, la de Tijuana, Baja California, demostró que está más vigente que nunca.
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El primer round tuvo golpes. Desde el principio se fueron soltando las manos pese a ser el episodio de estudio. Desde el principio se notaron las ganas de Nava para ir al frente, le hizo la invitacióna a la Coronita y ella le tomó la palabra. En el segundo round se equilibró la contienda y fue la de Nayarit la que más conectó.
Para el tercero y el cuarto, Nava se repuso del bache, siguió con duros golpes al rostro de la Coronita. Cada vez que soltaba la derecha, ya sea en forma de jab o volado, la Princesa Azteca hacía daño.
En el quinto sufrió otro bajón, producido más por su rival que por algún tipo de cansancio o falla en su boxeo. Pero respondió en el sexto, se sacudió los golpes y se apropio de la metralla. Jackie Nava era una viajera en el tiempo que no mostraba mella en su físico. Una joven con toda la experiencia.
Velocidad y dinámica; combinaciones y hambre. Nava se contagió de la frescura de la Coronita que también sacó golpes duros, sorprendió a Nava nuevamente en el noveno, pero nada le iba a quitar la victoria a la tijuanense.
Ese fue el tenor de la pelea. Sólo flaqueó en los rounds dos, cinco y nueve, pero en el resto, Nava mostró su vigencia, poderío y hambre de seguir con los guantes puestos en el ring.
Al final, las tarjetas de los jueces le dieron la victoria a la Princesa Azteca, que calló bocas, que sigue lista para un par de años más en el boxeo y que buscará a nueva rivales. Cobrita Luna y Barby Juárez suenan como posibilidad.
FDR