Antonio Margarito se lanzó hace poco a la yugular del Canelo Álvarez al indicar que noqueaba a puros borrachos, pero su opinión no fue tomada en serio como ex campeón OMB, IBF, AMB y CMB, pues su carrera fue ensombrecida tras ser acusado de hacer trampa y terminando como una de las máximas vergüenzas del boxeo mexicano. Aquí te decimos qué fue de él tras su derrota ante Pacquiao y a qué se dedica ahora.
Nacido en Tijuana el 18 de marzo de 1978, Antonio Margarito, también conocido como El Tornado de Tijuana, tuvo récord de 18 victorias en 21 peleas como amateur, para debutar profesionalmente en 1994, acumular solo tres derrotas en sus primeras 12 peleas y convertirse en campeón del mundo OMB durante cinco años ininterrumpidos. Checa qué fue de él tras perder ante Pacquiao.
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En marzo de 2002 venció al mexicano Antonio Díaz para inaugurar su reinado, que finalizó cuando cayó ante Paul Williams en julio de 2007. Un año después, recuperó su trono al vencer al puertorriqueño Kermit Cintrón en abril de 2008, aunque dejó el título vacante para ir por el campeonato del puertorriqueño Miguel Cotto, al que apabulló para catapultarse a las bolsas millonarias ante Shane Mosley en enero de 2009, con el Staples Center de Los Ángeles.
Tras hacer trampa, esto fue lo que pasó con Antonio Margarito
Antonio Margarito dejaba irreconocibles a sus rivales, como si les pegara con un arma punzocortante, por lo que antes de su pelea ante Mosley todo se vino abajo cuando Naanzim Richardson, entrenador de Shane, acudió al protocolo de supervisión de vendaje y se dio cuenta de que había un líquido anormal en las manos del mexicano: yeso, por lo que la Comisión de California decomisó los cojinetes del mexicano.
La pelea continuó, pero Antonio Margarito no mostró nada de lo que había hecho ante Cotto y terminó siendo destruido por Mosley en nueve rounds, para perder el título de la AMB con tremenda golpiza. Su entrenador, Javier Capetillo, fue suspendido de por vida para ejercer en California, sanción que se extendió a todo Estados Unidos después de comprobarse que el mexicano quiso sacar ventaja y siendo suspendido durante un año.
En 2010 venció a Roberto García, para luego ir por el título superwelter de la CMB ante el filipino Manny Pacquiao, quien le dio la goliza de su vida al provocarle desprendimiento de retina y rotura de pómulo en 12 rouds. Cotto quiso la revancha en diciembre de 2011, dejando en evidencia a Antonio Margarito y vengándose de su rival, al que calificó como una “vergüenza para el boxeo”.
Desde entonces su carrera no fue la misma, aunque ganó tres peleas más ante Maromero Páez, Ramón Álvarez y Carson Jones, para luego alejarse de los encordados en espera de una pelea interesante y dedicándose a un canal de Youtube en el que habla de boxeo y su esposa comparte consejos de fitness.
EG