Naoya Inoue se mantiene en la cima de la división súpergallo, y así lo demostró con una defensa contundente de sus cuatro títulos de la categoría sobre el mexicano Alan David Picasso, quien se vio superado en todos los rounds ante un campeón indiscutible que no frenó nunca en su agresividad.
"El Samurai", que llegó como amplio favorito al Mohammed Abdu Arena de Riad, Arabia Saudita, volvió a enseñarle al mundo por qué no se le considera en la cima de la montaña, sino como la montaña misma, imposible de escalar y que, una vez más, le ha arrebatado el invicto a otra figura internacional.
Con este resultado, el récord del "Rey David" registra su primera derrota en toda su carrera, que desde el 2017 no había conocido la caída, pues acumula un total de 32 victorias con 17 nocauts, además de un empate. Al equipo del estudiante de neurociencias en la UNAM no le queda más que evaluar su futuro rumbo a próximos retos.
El "Samurai" no muestra piedad
Reconocido internacionalmente por su instinto brutal, "el Monstruo" no se atrevió a buscar el KO contundente en terreno árabe, a sabiendas de que el azteca podía sacarle la sorpresa en cualquier momento. Sin embargo, el dominio a lo largo de todos los asaltos fue innegable. Inmediatamente después del tradicional round de reconocimiento, Inoue liberó toda su agresividad con un derechazo de autoridad.
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Para el cuarto asalto, el universitario ya mostraba sangre en la nariz, y aunque todo parecía indicar que el japonés buscaría acabar con las acciones temprano, Picasso se negó, e incluso tuvo distintos despertares que le sacaron uno que otro susto al campeón, en el sexto, el noveno y, sobre todo, en los últimos dos asaltos, en los que una combinación desconcentró brevemente al monarca, a sabiendas de que solamente podía ser vencido por nocaut. Para su infortunio, no fue suficiente para coronarse.
Secuelas inmediatas; ¿qué sigue para el campeón?
La velada en Arabia Saudita también estuvo marcada por otra derrota mexicana, y es que, en el turno semiestelar, a Sebastián Hernández le tocó caer ante Junto Nakatani en una pelea explosiva de principio a fin. Con su victoria, el nipón se posiciona como amplio favorito para ser el próximo retador por las preseas de las 122 libras.
La noche triste para México también fue complementada con una derrota en cuatro asaltos para el joven Leobardo Quintana, quien también tuvo que ver cómo el árbitro alzaba la mano de otro gladiador de la "Tierra del Sol Naciente", Reito Tsutsumi. En esta ocasión, el pugilismo japonés se impuso de manera contundente ante los puños aztecas.