El 7 de enero de 2019, Gerardo Martino fue presentado como nuevo técnico de la Selección Mexicana. Llegaba de ser campeón con el Atlanta United, en la MLS; y de haber dirigido a dos selecciones en Sudamérica, Paraguay y Argentina, además del Barcelona.
Los títulos lo acompañaron en varios clubes: uno con Newell’s Old Boys, dos con Libertad, otro con Cerro Porteño, la Supercopa de España con el Barça y el primer campeonato en la historia de los 'Five Stripes', en el futbol estadounidense. Como seleccionador nacional, dirigió eliminatorias mundialistas y perdió tres finales de Copa América: una con los paraguayos (2011) y dos con la Albiceleste (2015 y 2016).
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Martino llegó en lugar del colombiano Juan Carlos Osorio, después del Mundial de Rusia 2018, y enfrentó por primera vez la obsesión por el quinto partido. “Yo aspiraría a que en el menor tiempo posible tenga un equipo confiable”, dijo el rosarino, en su primera conferencia de prensa. Y lo tuvo. Porque México empezó ganando en el inicio de su ciclo y sólo perdió una vez en 17 partidos. El rival: Argentina.
Sucedió en el 10 de septiembre de 2019, en San Antonio, Texas. Ahí, el Tricolor mostró una versión distinta a la que había encontrado El Tata en los meses anteriores y cayó por goleada (0-4). “No creo que sea nuestra realidad”, explicó. Pero quedó como la única marca en su proceso como responsable del Tricolor, en un año y nueves meses de trabajo.
Con el título de la Copa Oro y los cuatro partidos de la Liga de Naciones de la Concacaf 2019-2020, el balance de Martino es de 15 victorias, un empate (ante Costa Rica) y una derrota, en 17 oportunidades. La última vez que saltó al campo con el Tricolor fue el 19 de noviembre de 2019, cuando derrotó a Bermudas (2-1) en el Estadio Nemesio Díez.
A partir de esos números, y de la inactividad en medio de la contingencia sanitaria, es que el argentino vuelve a manejar los controles de la Selección Mexicana. Reaparecerá este fin de semana en las instalaciones del CAR, en el primer microciclo del año; y, luego, dirigirá su primer compromiso amistoso ante Costa Rica, en el Estadio Azteca. Ese lugar místico que sólo ha visitado una vez (ante Panamá, el 15 de noviembre de 2019) desde que tomó el cargo.
Por Alberto Aceves