No cabe duda que México es uno de los países que más ama el fútbol, sin embargo, hasta hace poco las mujeres no contaban entre los millones de aficionados. Pero la pasión por este gran deporte pudo más que los prejuicios y María Cruzaley lo demuestra tras vivir una vida donde tenía que repartir pan, jugar fútbol e ingresar en el mundo de la política.
Si bien en la liga mexicana varonil podemos observar a jugadores como André-Pierre Gignac, Diego Lainez y Rogelio Funes Mori con sueldos millonarios por parte de sus clubes y de patrocinadores, la situación con las futbolistas es totalmente.
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Hasta hace no mucho, México se encontraba sumamente atrasado en cuestión de fútbol femenil, pero gracias a la insistencia de cientos de jugadoras y al apoyo que han brindado las instituciones deportivos fue posible crear la Liga MX Femenil.
Sin embargo, en sus inicios todavía había muchas precariedades para apoyar a las mujeres amantes del balompié y tenían que hacer hasta lo imposible por lograr su sueño de debutar en primera división.
María Cruzaley: de repartir pan a jugar fútbol
No cabe duda que existen varias pioneras dentro de la Liga MX Femenil, pero la exdefensora del extinto Monarcas Morelia se volvió un estandarte del fútbol para mujeres en nuestro país gracias a su perseverancia.
Si bien María Cruzaley no fue la primera ni la única en demostrar su talento dentro y fuera del campo de juego, sí la podemos considerar como una pionera en la aceptación de este deporte que se consideraba exclusivo para hombres.
La oriunda de Michoacán creció prácticamente con un balón en los pies desatando las críticas en contra de ella y su familia pues en su niñez, durante los años 80, era casi imposible que una niña tuviera deseos de ser futbolista.
Es por ello que con sus casi 30 años de edad, María Cruzaley pudo formar parte del equipo michoacano consolidándose como una gran defensa y, posteriormente, una muy buena mediocampista.
Pero muy lejos de los lujos que existen hoy en día, María Guadalupe Cruzaley Parra tuvo que combinar su trabajo en la famosa empresa de Grupo Bimbo al repartir pan con los entrenamientos en Monarcas Morelia, según comentó en entrevista para la revista Fútbol Total en 2020.
Su complicada vida duró algunos años mientras pudo jugar en el máximo circuito, no obstante, parece que las inquietudes de María trascienden más allá y y decidió posteriormente incursionar en el mundo de la política tras su retiro de las canchas en el 2020 alegando que los equipos no querían pagarle lo justo y por eso decidió alejarse de su deporte favorito para continuar con su trabajo.
Pues datos oficiales del ayuntamiento de Turicato, en Michoacán, indican Que hasta mayo del 2022 María Cruzaley fungía como síndico municipal de Hacienda, Financiamiento y Patrimonio Municipal.
Con el ejemplo de esta futbolista, si hace un llamado de atención a los altos directivos del balompié femenil para elevar el sueldo que perciben ya que para muchas es complicado continuar con su sueño y poder sobrevivir con ello.