Neymar vuelve a ponerse en el centro de la escena en un momento decisivo de su carrera. A menos de seis meses del inicio del Mundial 2026, el delantero brasileño decidió pasar por el quirófano para resolver una lesión que venía arrastrando desde hace semanas y encarar sin atajos el tramo final rumbo a la gran cita. La intervención marca un punto de inflexión en su temporada y en sus aspiraciones con la selección.
El Santos confirmó que el procedimiento se realizó con éxito este lunes en Belo Horizonte, luego de que el futbolista jugara el cierre del Brasileirão con el menisco dañado. La prioridad ahora es clara: una recuperación controlada, sin riesgos, que le permita llegar en plenitud física a la competencia más importante de su carrera, en lo que podría ser su última oportunidad mundialista.
Más allá del contratiempo físico, el presente inmediato de “Ney” invita al optimismo. Su impacto reciente en el campeonato brasileño fue determinante para evitar el descenso del Santos y reactivar la ilusión de los hinchas, mientras el cuerpo técnico de Brasil sigue de cerca cada paso de su rehabilitación.
La operación y el inicio de la recuperación
El club paulista detalló que su futbolista fue sometido a una artroscopía para tratar un desgarro en el menisco medial de la rodilla izquierda. En el comunicado oficial, Santos informó:
“El jugador Neymar da Silva Santos Junior fue sometido a una cirugía en la mañana de este lunes (22 de diciembre) en el Mater Dei Nova Lima por el Dr. Rodrigo Lasmar y su equipo. La cirugía fue exitosa y el atleta se encuentra bien”.
Además, el club explicó que “Neymar Jr. recibirá el alta a primera hora de esta tarde y comenzará su proceso de rehabilitación, que será coordinado por su fisioterapeuta Rafael Martini”. El tiempo estimado de recuperación rondaría entre uno y dos meses, según distintos reportes médicos, coincidiendo en gran parte con la pretemporada del conjunto blanquinegro.
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Un cierre de año decisivo con Santos
Antes de ingresar al quirófano, el extremo fue clave en el tramo final del Brasileirao. Anotó cinco goles y dio una asistencia en los últimos cuatro partidos, una racha que permitió al "Peixe" asegurar la permanencia y finalizar el torneo en el puesto 12. Una actuación que fue destacada como una verdadera proeza dentro del club.
El rendimiento del atacante también abrió la puerta a una posible extensión de su contrato. La institución evalúa renovarle el vínculo por seis meses más, con la idea de mantenerlo en el fútbol brasileño y bajo un control médico y deportivo estricto hasta el inicio del Mundial, en sintonía con el cuerpo técnico encabezado por Carlo Ancelotti.
El sueño del Mundial 2026 y una promesa intacta
Neymar no oculta su obsesión con la Copa del Mundo. Días atrás, durante su participación en el festival “Tardezinha” en São Paulo, dejó en claro cuál es su objetivo final:
“Haremos todo lo posible para que la Copa del Mundo llegue a Brasil. Lo posible y lo imposible. Me lo pueden exigir en julio. Si llegamos a la final del Mundial, prometo hacer un gol”.
A los 33 años, el máximo goleador histórico de la “Canarinha” sabe que el tiempo juega su partido, pero también que cada decisión tomada en estos meses será clave.
