Tras igualar al brasileño Mario Lobo Zagallo y Franz Backenbauer en Rusia 2018, el técnico francés Didier Deschamps tratará este domingo 18 de diciembre emular lo hecho por Vittorio Pozzo, aunque para ello deberá vencer con Francia a Argentina en el Estadio Lusail, en la final del Mundial de Qatar 2022.
Luego de igualar a Zagallo y Beckenbauer en Rusia 2018 y así como el argentino Lionel Messi buscará consagrarse en el mejor futbolista no solo de todo el planeta, sino de la historia al conseguir el único título que le falta, Didier Deschamps también buscará una marca difícil de igualar y que solo un entrenador ha conseguido en toda la historia del futbol: Pozzo, con Italia, quien luego se convirtió en cronista deportivo para La Stampa.
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Con la desventaja de tener a algunos de sus jugadores contagiados con el virus del camello, Didier Deschamps tratará de lograr dicha proeza de Pozzo a costillas de Lionel Messi, pues de conseguirla evitaría que el argentino supere al portugués Cristiano Ronaldo como el mejor jugador del planeta en la actualidad y a Maradona y Pelé como el máximo futbolista de toda la historia.
Deschamps tiene esto en común con Zagallo y Pozzo
Con una selección que incluso desde antes de que arrancara Qatar 2022 llegaba como máxima favorita para refrendar su título ganado en Rusia 2018, si Francia logra el bicampeonato Deschamps igualaría a Pozzo como el único entrenador en ganar dos Copas del Mundo de manera consecutiva, aunque lo superaría al ser también uno de los tres que que han ganado el título del mundo tanto como jugador como entrenador, junto con Zagallo y Beckanbauer.
“Vittorio il bello” entró al Olimpo de los entrenadores al llevar a Italia al campeonato en 1934, cuando Austria y Hungría eran los favoritos para conquistar la Copa Jules Rimet, pero Italia venció a España en cuartos de forma injusta y en la final derrotó a Checoslovaquia para que Pozzo fuera condecorado por el mismísimo Benito Mussolini.
En Francia 1938. Italia derrotó 4-2 a Hungría en la final y el entrenador italiano se convirtió así en el primer técnico de la historia en ganar dos Mundiales de manera consecutiva, algo que solo Brasil hizo en en Suecia 1958 y Chile 1962, aunque con dos seleccionadores distintos: Vicente Feola y Aymoré Moreira, respectivamente.
EG