La Federación Internacional de Triatlón se burló de los atletas. A pesar de que finalmente se aceptó realizar las pruebas varonil y femenil de dicha especialidad sobre las deplorables aguas del Río Sena, la controversia estalló al estallar los competidores por considerar que el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de París 2024 decidió darles luz verde para competir más por el escenario, que por su propia salud.
Y sin duda tienen razón, pues luego de que las pruebas fueran aplazadas por la terrible contaminación de las aguas del Río Sena, parecía difícil, casi imposible que el triatlón varonil y femenil se llevarán al cabo allí, aunque la millonaria inversión realizada sin duda influyó en exponer la salud de los competidores, que terminaron por estallar ante unas pruebas que dejaron mucho qué desear en los Juegos Olímpicos de París 2024.
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Mil 400 millones de euros no fueron suficientes
Después de que se gastaran mil 400 millones de euros en un intento de “purificar” las aguas del Río Sena, las autoridades prometieron que los Juegos Olímpicos de París 2024 albergaría la prueba de triatlón más espectacular de la historia, aunque las cosas no salieron según lo previsto pues varias sesiones de entrenamiento tuvieron que ser canceladas e incluso la prueba masculina tuvo que aplazarse, haciendo que muchos atletas terminaran por estallar contra la organización.
Durante la noche llovió más en París, pero la Federación Internacional de Triatlón y el Comité Organizador determinaron que “tras una reunión sobre la calidad del agua las partes interesadas han confirmado que los triatlones femenino y masculino seguirán adelante como estaba previsto”, una decisión que, sin duda, puso en riesgo la salud de los competidores con tal de no desaprovechar la millonaria inversión realizada en el Río Sena.
Así explotaron los atletas de triatlón en París 2024
La prueba femenina en la que participaron Lizeth Rueda y Rosa Tapia representando a México acabó con quejas de la española Anna Godoy, que indicó que “creo que la Federación Internacional se ha reído un poco de nosotros. Ha habido salida nula y no se ha repetido”, mientras que la otra triatleta española, Miriam Casillas, afirmó que “está pasando en cada carrera que se tiran antes y no puede ser porque nos perjudican a las legales. Mucha gente lo ha hecho y no ha habido ningún castigo. Me han ahogado y me he quedado bastante tiempo debajo del agua. Creo que va contra los valores del deporte”.
Ah, pero respecto al agua del Río Sena, Casillas expresó que “para nada han pensado en las atletas. Aquí se ha pensado más en el escenario, en la imagen, en que quede bonito y en vender el Río Sena, que es lo que querían desde la inauguración, y no se ha pensado nada en la salud de los atletas. Si se hubiera pensado en la salud de los atletas, no se habría hecho aquí y hubiera habido un plan B, de verdad. Es una pena. Es mejor decirlo y no quedarnos callados”.