Jueves 26 de Septiembre 2024
CARRERAS DE CABALLOS

5 FOTOS del Hipódromo de las Américas, el lugar favorito del Mantequilla Nápoles

El recinto abrió sus puertas en 1943, durante plena Segunda Guerra Mundial y recibió a figuras de la talla de José Ángel 'Mantequilla' Nápoles.

Hipódromo de las Américas.¿El Mantequilla Nápoles era apostador?Créditos: Especial
Escrito en BOX el

Las carreras de caballos duran unos cuantos segundos, suficiente para detener al mundo y los corazones de los aficionados que se dan cita en el Hipódromo de las Américas cada fin de semana; un lugar folclórico en toda la extensión de la palabra en donde el famoso boxeador José Ángel ‘Mantequilla’ Nápoles era comunmente visto.

Ubicado en la Delegación Miguel Hidalgo de la Ciudad de México, este sitio reune a multitudes sin distinción de clase, probablemente es uno de los pocos recintos que logra eso en la capital del país: los más veteranos descienden del autobús que sale de la estación del Metro Tacuba, aunque también es posible ver la llegada de familias adineradas de las zonas aledañas. 

Pero nada de eso importa cuando suenan las pisadas de los animales en la arena…

El Hipódromo de las Américas abrió sus puertas en 1943 durante plena Segunda Guerra Mundial, está diseñado para caballos Purasangre y cuartos de milla, fue pionero en las apuestas en la República y en la actualidad la entrada más barata cuesta 15 pesos, además, es posible realizar jugadas sencillas desde los 10 pesos (solo para mayores de edad); permite que los niños puedan apreciar los eventos.

Una especie de lugar sagrado que guarda las memorias de múltiples generaciones, incluyendo a figuras de la talla de Miguel Marín, legendario portero de Cruz Azul, Héctor Miguel Zelada, figura del Club América y el propio Mantequilla Nápoles.

“Su sitio favorito era el Hipódromo de las Américas, llegaba sin avisar con los pantalones ajustados de dinero, se le notaban desde la distancia los billetes doblados. Era mal apostador y peor perdedor”, escribió Carlos Barrón sobre el cubano en el libro ‘Tiempo de compensación’.

¿De qué murió el Mantequilla Nápoles?

Probablemente las apuestas influyeron en cómo el Mantequilla Nápoles perdió su fortuna, fue uno de los boxeadores más destacados en la década de los setenta, le caracterizaba un interesante movimiento de piernas, producto de su amor por el baile, y una fuerte pegada que ponía a temblar a cualquiera.

José Ángel se retiró con un récord de 81 victorias (54 por nocaut) por solo siete derrotas, así como campeonatos en peso wélter por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y el Consejo Mundial de Boxeo (CMB), sin embargo, uno de sus combates más llamativos fue contra Carlos Monzón, un suceso que inspiró a Julio Cortázar a escribir un cuento.

Por si no fuera suficiente, el boxeador llegó a aparecer en una película con El Santo, parecía que tenía la vida resuelta, pero el debacle vino después de colgar los guantes en 1985: terminó en la miseria, sin una sola propiedad, de hecho, vivió en una casa prestada en Ciudad Juárez los últimos años de su vida con una condición física muy deteriorada, producto de la diabetes, la demencia senil y efisema pulmonar.

De cualquier forma, es muy probable que su andar por el Hipódromo de las Américas sea recordado hasta el fin de los tiempos y por ello presentamos las mejores fotos de ese recinto:

La pista debe estar a la perfección para los caballos. 

A pesar de que es posible apostar, el lugar tiene un ambiente familiar.

Los adultos mayores son los que generalmente pueden leer la nomenclatura del programa a la perfección. 

El corazón se detiene por algunos segundos... 

Fotos: Cuartoscuro