Si los superhéroes son tu inspiración, aquí te traemos la dieta y la rutina de entrenamiento a las que se tuvo que someter el actor británico Tom Holland para interpretar su papel en Spider-Man No Way Home.
Todos los actores que interpretan a superhéroes de Marvel han tenido que hacer duros sacrificios para interpretar a sus personajes, desde Chris Evans como Capitán América hasta Chris Hemsworth como Thor o incluso Scarlett Johansson como Natasha Romanoff (Black Widow), por lo que Tom Holland no podía ser la diferencia.
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Así es que si quieres ponerte y verte como Peter Parker en la nueva saga del vecino amigable, no te pierdas de estas recomendaciones que, sin duda, te harán sentir como todo un personaje de película.
Aunque Tom Holland y su personaje definitivamente no son los más musculosos del Universo Marvel, Spider-Man sí requiere ciertas habilidades que le exigieron al actor británico muchos sacrificios a nivel físico y mental.
Si tu idea es más parecerte a Hulk, definitivamente esta no es tu dieta ni mucho menos tu rutina de ejercicios, pues recuerda que Peter Parker es un adolescente correoso y de músculos marcados, aunque no tan desarrollados.
Eso en parte Tom Holland ya lo traía al también ser un chico hiperactivo y bailarín profesional que destacó en el musical ‘Billy Elliot’, que le exigía los cuidados y entrenamientos para mantenerse en forma y en línea.
¿Cuál es la dieta y rutina de Tom Holland para Spider-Man?
La dieta que tuvo que seguir Tom Holland para interpretar a Spider-Man fue muy similar al de otras transformaciones físicas de estas características: el superávit calórico y una gran ingesta calórica para moldear después con el entrenamiento, lo que se conoce como bulking, según el portal Superhero Jacked.
Pero como el volumen muscular que se quería en Spider-Man no es como el de personajes más adultos, el nivel de bulking también es menor y Tom Holland pudo comer todo lo que quiso de forma saludable y controlada, para después poner en marcha la maquinaria en la cancha, el ring y el gimnasio.
Respecto a su entrenamiento, Tom Holland tuvo que hacer entrenamientos por circuitos y box, hasta saltos en aparatos gimnásticos y otros más extremos o altamente especializados.
En un programa de seis semanas, el actor se sometió a rutinas de puentes de cadera, peso muerto, flexiones, ejercicios básicos de levantamiento de peso, sentadillas, flexiones de Spider-Man, rutinas de barras y saltos acrobáticos, así como entrenamientos especializados con cojines que sacaban descargas mientras hacía su rutina.
En total, eso lo llevó a perder más de seis kilos de masa muscular, sin ganar un gramo de grasa.
Así es que échale ganitas al gimnasio, pues recuerda que con un gran poder también llega una gran responsabilidad.
EG