Los expertos establecen que el dormir bien es fundamental para que el cuerpo reaccione favorablemente a las actividades que debe hacer al día siguiente dentro del trabajo. Ante tal situación, en los siguientes párrafos se analizará cuál es la mejor posición para descansar satisfactoriamente por las noches.
Se sabe que las personas pasan, en promedio, cerca de un tercio de su vida durmiendo. Lo habitual para estas es contar con un sueño profundo de seis a ocho horas dependiendo la hora en la que se levantan o, bien, el momento en el que van a la cama con el objetivo claro de dormir.
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Bajo esta panorámica, es preciso indicar que el cuerpo suele recargarse y repararse de las actividades que se realizan si es que se logra dormir bien. Dicho lo anterior, algunas personas han comenzado a cuestionarse si existe una posición más idónea al momento de descansar que traiga consigo respuestas favorables al reponerse al día siguiente.
Dormir bien por las noches; ¿cuál es la mejor posición para ello?
Lios Krahn y Vired Somers, doctores de Mayo Clinic, revelaron detalles en torno a cuál es la mejor posición y cuál es la más complicada para dormir bien toda vez que la postura es fundamental al momento de conciliar al sueño y, por ende, recargarse de energía.
De acuerdo con los expertos, la mejor posición para dormir por las noches es colocar tu cuerpo de costado, pues esto ayuda a disminuir los ronquidos (si es que padeces de estos) y, a su vez, beneficia a evitar el colapso en las vías respiratorias. Esta postura, además, ayuda a eliminar la presión existente en los órganos internos, por lo que también se recomienda para las mujeres embarazadas.
Bajo esta postura, la Sleep Foundation establece que dormir de costado colocando una almohada entre las dos rodillas evita el dolor de espalda y los dolores en el cuello, por lo que se recomienda esta posición para quienes tienen problemas en esta parte del cuerpo.
Finalmente, también se establece que la peor posición para quien busca dormir bien por las noches es hacerlo boca arriba. Esta postura puede resultar cómoda para ciertas personas; sin embargo, al dormir de esta forma la lengua cae obstruyendo las vías respiratorias, lo cual hace que los ronquidos sean más fuertes y, por ende, el sueño menos profundo.
AC