Muy frecuente en atletas que practican deportes de compacto como las artes marciales, el boxeo, la lucha o el rugby, las llamadas orejas de coliflor son una deformidad que aparece en el pabellón auricular, sobre todo tras recibir contusiones, aunque existen otras causas que aquí te decimos no solo como combatirlas, sino también el tratamiento para prevenirlas.
Se les denomina orejas de coliflor debido a que es la forma que toman los pabellones al irse deformando a causa, mayormente, de recibir impactos, aunque también se pueden generar por otras causas que aquí te decimos cómo las puedes combatir y prevenir con determinado tratamiento, además de los posibles riesgos implicados.
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¿Qué son y cómo aparecen las orejas de coliflor?
Más allá del mito de que las orejas de coliflor son privativas de los luchadores y boxeadores, su nombre real es el de hematoma pericondral u otohematoma, deformidad en el pabellón auditivo que surge por diversas causas, aunque mayormente por recibir impactos o traumas severos o frecuentes que provocan acumulación de sangre entre el pericondrio y el cartílago auricular, por lo que la oreja va adoptando la forma de una coliflor que debes atender con este tratamiento.
Dicho hematoma no se resuelve, sino que se mantiene impidiendo que el cartílago se nutra al no existir flujo sanguíneo, lo cual provoca necrosis o muerte del tejido, provocando que este se destruya, se deforme y aparezcan retracciones, abultamientos u otras deformidades.
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Otras causas de las orejas de coliflor y tratamiento
Según una publicación de unCOMO, pese a que los traumas suelen ser una de las causas más usuales de la oreja de coliflor, la verdad es que cuando los piercings no son bien colocados y se infectan también pueden llevar a que una persona desarrolle esta condición, por lo que se recomienda resolver el daño desinflamando el área con este tratamiento.
También pueden aparecer cuando hay procesos con inflamación o infecciones severas o áreas necrosadas que se deben extraer para que los demás tejidos se puedan recuperar o mantenerse sanos, para lo que se recomienda un drenaje quirúrgico, haciendo punciones o incisiones en la superficie de la oreja para evacuar el hematoma, mantener compresión en el área y tratar con antibióticos. Para prevenirlas, los doctores sugieren usar cascos, gorro de melé o férulas auriculares, además de evitar prácticas invasibas a los tejidos de la oreja.
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