Hacer ejercicio constantemente es muy útil para reducir el riesgo de padecer enfermedades, de hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda al menos 150 minutos por semana con actividades como correr, caminar o bailar y aunque hay una gran variedad de rutinas que se pueden ejecutar, esta vez hablaremos de saltar la cuerda y sus beneficios en el cuerpo.
Antes de comenzar es importante recordar que la actividad física se debe combinar con un plan de alimentación elaborado por un experto en función de nuestras necesidades u objetivos y NO debemos consumir productos milagro o caer el dietas de moda, pues podrían tener graves repercusiones en el sistema.
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Además, no tenemos que olvidar calentar de forma adecuada para evitar lesiones, el cuerpo necesita descanso un día a la semana y si somos principiantes no hay que prescindir de establecer proyecto que nos permita avanzar gradualmente.
¿Qué beneficios tiene saltar la cuerda?
Cualquier persona que haya asistido a un gimnasio de boxeo se habrá percatado de que muchos atletas saltan la cuerda, principalmente para mejorar la resistencia y el balance en las piernas arriba del cuadrilátero.
En términos generales, la Universidad de Palermo asegura que con este entrenamiento se puede quemar una buena cantidad de calorías, incluso por encima del running si se hace de forma adecuada y la mayor ventaja es que no se necesita una gran inversión para comenzar.
Con este ejercicio se puede trabajar a la perfección el tren inferior (glúteo mayor y gemelos) el superior (brazos y hombros) y hasta el medio (amdominales y lumbares), pero también favorece a las articulaciones.
Asimismo, esta rutina ayuda a fortalecer el corazón, a tonificar los músculos y darles más fuerza, mejora el aparato respiratorio, ayuda a la coordinación al involucrar el sistema nervioso, quema calorías y trabaja la propiocepción.